Stampe Vertongen SV 10: un caza pesado/bombardero biplano

Jean Stampe se formó como piloto militar durante la Primera Guerra Mundial. Desde 1916 realiza salidas, incluso llevando al Alberto I como observador sobre el campo de batalla. Coninuaría volando para el rey hasta su muerte.

En 1928, Renard, el diseñador preocupado de Stampe y conocido en este blog por su avión presurizado de los años 30, dejó la firma Stampe et Vertongen para fundar su propia compañía aeronáutica.

Stampe, por recomendación de su hijo Leon Stampe, fichó para sustitiur a Renard al ingeniero ruso George (Yury) Ivanov. El primer avión de Ivanov aparentemente fue el SV-3. Su último desarrollo sería el SV-10, nacido por una petición de la Aviación Militar Belga.

En 1934, la Aviación Militar belga había concebido un plan para equipar sus escuadrones de bombardeo con bombarderos medios ​​altamente armados. Dos fabricantes de aviones belgas no dudaron en diseñar una máquina de este tipo.

Uno de ellos fue LACAB, que presentó su GR.8.

El otro fue Stampe & Vertongen. El bimotor SV-10 fue una creación de George Ivanow, el ingeniero de la casa. Léon Stampe, hijo de Jean Stampe y sargento piloto de reserva en la Aviación Militar, sería el piloto de pruebas.

Estaba diseñado como avión multipropósito: caza pesado, reconocimiento y bombardero. Estaba movido por dos Gnome Rhone 14 Krsd radiales de 780 hp (800, según otras fuentes). Su tripulación estaba compuesta por el piloto, un artillero de morro/bombardero y un artillero de cola que manejaba dos ametralladoras. Desconocemos cuál de los dos artilleros hacía las labores de navegante y radio. La velocidad máxima estimada era de 350km/h. Iba armado con un cañón de 20mm, cinco ametralladoras de 7.5mm y podía transportar hasta 600kg de bombas.

El primer vuelo fue el 4 de octubre de 1935.

En la tarde del sábado 5 de octubre, Léon Stampe e Ivanow despegaron para un segundo vuelo, ahora ya con escarapelas belgas decorando el avión.

El despegue transcurrió sin problemas y el bombardero subió a una altura de 1000ft/300m. Después de dar un amplio viraje de 180°, voló lentamente sobre el aeródromo.

Pero de repente el SV-10 comenzó a girar hacia la izquierda. El piloto corrigió rápidamente, pero la aeronave volvió a girar casi de inmediato y se lanzó al suelo a una velocidad vertiginosa. Primero cayó sobre el techo de una casa en Aeszaklaan te Borsbeek, luego golpeó un árbol, derribó un muro de siete metros de largo y finalmente se estrelló contra unos árboles en el jardín del edificio mencionado. Tanto el piloto como el ingeniero jefe, que iba a bordo, murieron. El desarrollo posterior fue abandono.

Dos calles en las cercanías del aeropuerto de Amberes llevan el nombre de George Ivanow y Léon Stampe. Ahora descansan uno al lado del otro en el cementerio de Sint-Rochuskerkhof en Deurne. Ambas placas de identificación de sus lápidas se conservan en el Museo Stampe & Vertongen en el aeropuerto de Amberes-Deurne.

Fuentes

HM280: El piojo del cielo que hizo la mili

Pou du ciel militar en el museo Lane Motor.

El piojo del cielo es un conocido ultraligero francés de los años 30, desarrollado por Henri Mignet. Un desarrollo muy ligero y, en teoría, fácil de volar, al ser una aeronave de dos ejes: solo cabeceo y dirección, el alabeo se logra gracias al acoplamiento entre alabeo y cabeceo, y el dihedro del segmento exterior del ala.

Es un biplano, con las alas en tándem, sin alerones ni timón de profundidad. La palanca de mando actúa sobre el timón de dirección, para virar, y sobre una de las alas, que pivota para cambiar su ángulo de ataque y tener así control de profundidad.

Comenzó su desarrollo como monoplaza, e incluso hubo alguna versión de mayor tamaño. Pero hoy nos vamos a centrar en la versión militar: el Pou Maquis.

La Pou du Ciel es una aeronave pequeña, ligera, fácil de remolcar y ocultar.

Pou du ciel que fotografié en Bruselas, en el Museo Real del Ejército, con menos de 20CV

Por eso Albert Eon, jefe de la resistencia francesa en Bretaña se aproximó a Henri Mignet en 1944 para pedirle un desarrollo militar con alas plegables: era ideal para ocultar en bosques, graneros y podía dotar a la resistencia de un aparato pequeño, silencioso y difícil de detectar en vuelo, útil para realizar vuelos de enlace, infiltración e incluso sabotaje. Así nació el HM-280.

La mujer de Mignet murió durante el desarrollo del avión, lo que le desmoralizó bastante. No obstante llegaría a finalizar un prototipo que, si bien no vería servicio durante la guerra, sí sería probado después. En diciembre de 1945 aparecería en la revista L’Aérophile un artículo llamado El piojo del cielo hace el servicio militar.

HM-280, Arma de guerra

El Coronel Eon, al mando del campamento de Frileuse había organizado el sábado 30 de noviembre con la asistencia del Sr. Mignet una demostración del HM 280, tipo militar. Es probable que este dispositivo sea de gran utilidad para la lucha clandestina gracias a su maniobrabilidad y su pequeño tamaño. Es el prototipo del HM 290 cuyos planos se han puesto recientemente a disposición de los aficionados y que en la actualidad está siendo construido por muchas personas deseosas de volar de forma económica. El clima no se prestaba bien para tal demostración, chubascos violentos, viento y fuertes ráfagas de hasta más de 15 metros-segundo. H. Mignet realizó un espléndido vuelo donde se destacó la maniobrabilidad de su aeronave. Caídas de ala, «chandelles» y aterrizajes en pocos metros. A pesar de la ausencia de alerones, la estabilidad de la pequeña máquina parecía perfecta. El Coronel Eon invitó a los asistentes a entrar en calor con una taza de té y mostró proyecciones que mostraban los usos prácticos del «Pou du Ciel» como arma de guerra. Para terminar, y esto hará las delicias de todos los constructores aficionados, nos informó que el sitio de Frileuse estaría equipado con un gran hangar este verano y que los propietarios de aviones pequeños podrían venir y albergar allí sus aviones para sus pruebas y ¡Ni siquiera hay que temer a los gendarmes de la Fuerza Aérea allí! A.Reboul

EL PIOJO DEL CIELO HA HECHO SU SERVICIO MILITAR Un artículo de la revista «L’Aérophile» de diciembre de 1945
Prototipo original. Compárese su tamaño con el del Lysander o la Storch

También era protagonista en Les Ailes.

El H.M.-280 es la versión más reciente de la fórmula de Henri Mignet, la que precede al H.M.-290, una aeronave de construcción amateur. Como señalamos en otra parte, en la página 8, el 24 de marzo tuvo lugar en Saintes un concurso de maquetas. El interés de esta competición se vio reforzado por la presencia de Henri Mignet quien, durante el transcurso de la tarde, realizó una muy buena demostración de maniobrabilidad a bordo de su H.M.-280. Henri Mignet desató un auténtico entusiasmo entre los espectadores realizando magníficas caídas de ala, «chandelles» -algo notable para un aparato de 30 CV- y pasadas rasantes. Parece que este H.M.-280 constituye un progreso innegable sobre el avión anterior y que su piloto-constructor tiene el control total del mismo. Es el mismo aparato que realizó, el año pasado, alrededor de París, las pruebas de que hemos hablado y que Mignet, una vez terminadas, trajo en vuelo de regreso a Saintes. Este avión ya tiene un número bastante alto de horas de vuelo en su haber. Durante la demostración en Saintes, un aficionado de la región presentó, por su parte, un “Pou-du-Ciel” que también logró un buen vuelo. Desafortunadamente, este terminó en un «piloning» sin demasiado daño, sin embargo, para el piloto.

Les Ailes
Prototipo del HM-280

El HM-280 no tendría éxito como aeronave militar, sin embargo fue desarrollada como aeronave civil de construcción amateur bajo el nombre de HM-290.

HM-290 que fotografié en el Real museo del ejército de Bruselas

No sería, por cierto, el último avión militar de Mignet, puesto que el ejército de tierra francés compraría 24 (26 o 29, según las fuentes) Mignet HM.1000 Balerit.

Tras los ensayos en los 80 para armar un ultraligero, en los 90 se ensayó con el HM-1000. Se buscaba un aparato que se transportara fácilmente por carretera, con alas plegables, y que se pudiera poner en estado de vuelo en menos de cinco minutos.

Durante 18 meses se realizaron pruebas para ver cómo podía encajar en la doctrina militar. El aparato contaba con un piloto y un observador. La idea era dar soporte a los convoyes, proporcionando reconocimiento cercano y haciendo de guías. Además se proponían como medio de enlace rápido con otras unidades.

Cuando estalló la Guerra del Golfo los ensayos aún no habían concluido. Tampoco se juzgó útil para Bosnia, debido a su vulnerabilidad.

Los ensayos terminaron en mayo de 1993. El fabricante introdujo algunos cambios, como un sistema de transmisión de potencia para la hélice más robusto, una nueva hélice, un sistema de combustible mejorado, y una funda resistente a balas para el paracaídas balístico.

Hoy día todas estas funciones, a excepción de las de enlace, se pueden realizar de una forma más segura y discreta con pequeños drones.

No serían los franceses los únicos en probar con ultraligeros, ¡los británicos probaron con uno inflable!

Fuentes