El mercado de la aviación antiincendios sigue dando señales buena salud y de actividad con la creación de nuevos aviones y nuevas conversiones. Y de empresas que no se habían dedicado a ello antes entrando en el negocio. Tal es el caso de Metrea, una empresa privada que proporciona servicios militares, tales como repostaje en vuelo —de hecho, el año pasado se hicieron con toda la flota de KC-135 que estaban retirando los franceses— entrando en el mundo de la lucha contra los incendios forestales con una modificación del De Havilland Canada Dash 8-300.
IAI, Israel Aerospace Industries, es conocida —entre otras cosas— por sus conversiones del Boeing 767 a avión cisterna y en avión carguero y por sus desarrollos de electrónica para combate. Y con toda esta experiencia quiere crear una variante de la versión carguero para Fire Free Forest (3F), además de un completo sistema de gestión de detección, control y gestión de información especializado en incendios forestales, según hemos sabido por la nota de prensa de IAI.
Safran Aircraft Engines ha presentado una serie de solicitudes de patente que ofrecen una visión de las innovaciones que se están considerando para el motor de rotor abierto RISE (que se espera que consuma un 20% menos que los mejores motores actuales), desarrollado en colaboración con GE Aerospace a través de su empresa conjunta CFM International, en la que Safran se hace cargo de los sistemas de baja presión y del fan en el motor RISE, mientras que GE se encarga del sistema de alta presión.
El motor de rotor abierto viene a ser un turbo-fan de tan alto índide de derivación que se prescinde de su carenado exterior, quedando así una configuración que parece un híbrido entre turbofan y turbohélice Justo tras el fan se situa un disco de estator. Mientras que en los motores turbofan y turborreactores los discos de estator y de rotor se alternan en el compresor, para aumentar la presión del aire, en el RISE —además de en el compresor—, se encuentran en la zona del ventilador. Parece ser que las turbinas de estator ayudarían a «enderezar» el aire, reduciendo los torbellinos tras el estator y reduciendo las pérdidas.
Conocimos a Otto Aviation con el Celera, un avión con fuselaje en forma de bala y un motor diesel que movía una hélice. Y recientemente han vuelto a las noticias con su nuevo diseño, Phantom 3500, que recupera la ya vieja idea del avión sin ventanas para ahorrar peso, y por tanto combustible.
¿Recordáis los lotes de titanio que no cumplía las especificaciones que se usó en varios 787 y que también afectó a Airbus? La FAA planea hacer obligatorias inspecciones para identificar las piezas que se fabricaron con este titanio en 100 aviones del fabricante estadounidense.