Helicópteros autónomos: Rotor Technologies lanza el uav civil más grande del mundo

¿Recordais a Rotor Technologies? Fueron noticia aquí en el blog por dronizar helicópteros ya existentes, ahorrando los costes de desarrollo de la célula y centrarse tan solo en el desarrollo del software necesario para el control de un helicóptero conocido y de probada eficacia y fiabilidad, como son los Robinson. Y este martes 13 de agosto ha anunciado dos nuevos vehículos aéreos no tripulados (UAV) —ambos basados en el Robinson 44— con las primeras entregas a cliente para el 2025 por menos de 1M$:

  • Airtruck, un UAV utilitario con unos 500kg capacidad de carga (850k$)
  • Sprayhawk, un UAV agrícola con capacidad de más de 400 litros (990k$)

Ambos tienen un peso máximo de despegue de 1135kg, lo que los convierte en los drones civiles más grandes (con mayor masa) del mundo, orientados a la construcción y al mundo agrícola, respectivamente.

Rotor y Robinson han colaborado en el desarrollo y la certificación; las dos compañías mostraron un prototipo estático de preproducción del Airtruck, anteriormente conocido como R550X, del que os hablamos aquí, en HeliExpo a principios de este año.

Con la presentación del Airtruck y el Sprayhawk, estamos emocionados de traer la fabricación de drones de vuelta a los Estados Unidos, siendo más grandes, audaces e innovadores que nuestra competencia global. Estos dos helicópteros tienen una capacidad sin precedentes que será transformadora para los operadores de drones, quienes durante muchos años han deseado tiempos de vuelo más largos y mayores cargas útiles. Hector Xu, CEO de Rotor

Creemos que el Sprayhawk y el Airtruck son el camino correcto para los agricultores estadounidenses, los aplicadores aéreos y las industrias de la construcción y la logística. Muchos de los drones en el mercado hoy en día probablemente no resistirán la prueba del tiempo. La necesidad de aviones más grandes y confiables es clara, y nuestro nuevo lema, ‘Drones grandes para trabajos difíciles’, mostrará al mundo que hablamos en serio. Ben Frank. Director Comercial de Rotor

Desde que habláramos por primera vez de un helióptero autónomo allá por 2009 hasta 2022 en el que comentábamos los vuelos autónomos de Sikorsky con su Black Hawk, hemos hablado en numerosas ocasiones de esta tecnología, incluso capaz de aterrizar en plataformas móviles, que promete revolucionar las tareas de las 3D: dull, dangerous and dirty. Esto es, misiones largas y aburridas (vigilancia, peinar zonas en misiones de búsqueda), peligrosas (un espacio aéreo especialmente disputado y sobre el que no se tiene superioridad aérea o hay exceso de misiles anti aéreos sin neutralizar o antiincendios) y sucias (guerra NBQ – Nuclear Bacteriológica Química).

Fuente: Nota de prensa de Rotor.ai

Aviones ligeros de construcción amateur para simular misiles y UAVs

BD-5 de Smart 1

Manu, ex piloto del 43 y autor de los libros en los que narra su experiencia en él, solía decirme en nuestras charlas que «combatirás como entrenes, o que volarás como entrenes». Y eso lo han tenido claro las fuerzas aéreas de todos los países desde siempre. Aunque sólo las que manejan presupuestos más abultados han podido contar con escuadrones agresores específicos, dedicados a estudiar las tácticas de los potenciales enemigos y utilizar sus aviones, o aviones lo más parecidos posibles, para entrenar a los pilotos de las unidades regulares y desarrollar nuevas tácticas y doctrinas.

SubSonex de KestrelX

En los últimos tiempos, no sólo existen escuadrones agresores, sino que incluso hay empresas a las que se puede subcontratar esa función. Y este es el caso de KestrelX y Smart-1 (Small Manned Aerial Radar Target, Model 1).

Ambas se han especializado en simular y entrenar a las fuerzas aéreas que requieran sus servicios contra misiles de crucero. Y contra una amenaza más reciente y que la guerra en Ucrania ha puesto sobre la mesa: los aviones no tripulados.

Para ello están utilizando aeronaves de construcción amateur (tipo «Ikea», de las que la gente compra los planos y el kit y las monta en el garaje de su casa).

KestrelX ha optado por el monopaza a reacción de Sonex, llamado SubSonex JSX-2, que monta una barquilla ventral para aviónica y sistemas adicionales.

Smart-1 ha optado por el Bede-5, cuyos planos originales se pueden comprar por menos de 30 dólares, en su variante a reacción.

Ambos aviones poseen las mismas ventajas: su adquisición y producción es económica—incluso se pueden encontrar a relativo bajo coste en el mercado de segunda mano—, su mantenimiento es sencillo, poseen velocidades similares a las de los vehículos que se desea emular, y su firma radar y térmica son reducida, haciendo complicada su detección.

¿Sería posible en España la creación de una empresa con estas características para ayudar a entrenar al Ejército del Aire en la detección e intercepción de drones, o a la Guardia Civil para practicar la detención de aeronaves utilizadas a baja cota para cruzar el estrecho con droga?

El SubSonex, por cierto, también ha servido como base para un avión birreactor no tripulado.

Fotos vía DVIDS y Smart-1

La imagen: B-29 y B-2 volando en formación

En la base aérea de Whiteman se ha celebrado recientemente (13 y 14 de julio) Wings over Whiteman 2024. Y nos ha dejado una estampa no esperada, y que posiblemente es la 1ª vez que se produce. Un B-29 y un B-2 volando en formación.

Foto publicada por la fuerza aérea en su página de Facebook

Y creo que todos hemos pensado lo mismo al ver las imágenes: o el B-29 es más pequeño de lo que pensábamos, o el B-2 es más grande.

vía DVID
DVID
DVID

Como curiosidad histórica, el B-29 fue el primer bombardero de la USAAF (luego USAF) con capacidad de portar bombas atómicas. El B-2 es el último bombardero que ha entrado en servicio con esa capacidad.

Algunos usuarios de Twitter han ido publicando ya algunos vídeos.

Y no es descartable que, en breve, empiecen a aflorar los vídeos y fotos de los spotters. Así que actualizaremos si encontramos alguno más.

Primera foto oficial del ala volante híbrida-eléctrica XRQ-73

El 26 de junio os presentábamos el XRQ-73, un ala volante que estaba siendo desarrollada para DARPA por varios contratisas, siendo el principal Northrop Grumman quien, precisamente, acaba de publicar una nota de prensa con la primera foto real del aparato.

La foto del ala volante se puede descargar en HD de aquí.

SHEPARD es un programa experimental que aprovecha la arquitectura de propulsión híbrida eléctrica y algunas de las tecnologías de componentes del proyecto anterior Great Horned Owl de AFRL IARPA. Además el programa, para reducir riesgos de desarrollo y acortar tiempos, pretende reutilizar todas las tecnologías ya conocidas y disponibles o desarrolladas para otros programas de DARPA, integrándolos para desarrollar un vehículo nuevo.

Evolución desde el programa anterior XRQ-72A a XRQ-73

Más allá de que la propulsión es híbrida-eléctrica, como un «Prius con alas», no han trascendido más detalles de la misma. Sí se sabe que su predecesor contaba con un par de motores que actuaban como generadores y que movían cuatro motores situados sobre el ala, lo que hacía que el diseño no tuviera nada de furtivo, aunque las hélices entubadas sí sugieren un diseño silencioso.

XRQ-72A, via Designation System

El contratista principal para SHEPARD es Northrop Grumman CorporationScaled Composites, es un proveedor importante, junto con Cornerstone Research GroupBrayton EnergyPC Krause and Associates y EaglePicher Technologies.

La presencia de los contratistas garantizan el uso extensivo de materiales compuestos, así como larga experiencia en alas volantes.

El equipo de DARPA incluye miembros del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL), la Oficina de Investigación Naval (ONR) y nuestros combatientes.

Se espera que el avión XRQ-73, clasificado como un UAS de Grupo 3 con un peso aproximado de 1,250 libras (567.5kg), realice su primer vuelo a finales de 2024.

Nota de prensa de Grumman

REDONDO BEACH, California – 10 de julio de 2024 – Northrop Grumman Corporation (NYSE: NOC) ha anunciado el diseño y la construcción del Series Hybrid Electric Propulsion AiRcraft Demonstration (SHEPARD). El sistema aéreo no tripulado desarrollado para DARPA recibió recientemente la designación oficial de XRQ-73.

Construido en colaboración con Scaled Composites, una filial de Northrop Grumman, el SHEPARD XRQ-73 es un programa «X-prime» de DARPA que aprovecha la arquitectura híbrida eléctrica y las tecnologías de componentes para madurar rápidamente un nuevo diseño de aeronave centrado en misiones con arquitectura de propulsión y clase de potencia para el Departamento de Defensa.

Helicópteros Del Mar, de blancos aéreos al mini Chinook DH-20

DH-1 en vuelo

A mediados de la década de 1940, un joven Stanley Hiller Jr. y su padre viajaron desde el Área de la Bahía a Santa Mónica, California, hogar de Donald Douglas y Douglas Aircraft Company.

Hiller había construido y probado recientemente el helicóptero XH-44 y buscó consultar con Douglas las perspectivas para crear la primera fábrica de helicópteros de la costa oeste.

Douglas asignó a Bruce Del Mar, uno de sus prometedores jóvenes ingenieros, para que se reuniera con Hiller y revisara sus diseños. Los encuentros entre los dos fueron breves, pero marcaron la intersección de dos notables carreras en la aviación.

Del Mar tenía una conexión con el norte de California, ya que se graduó en Ingeniería Mecánica en la Universidad de Berkeley en 1937. Pasó varias vacaciones trabajando para Donald Douglas y rápidamente aceptó un puesto de tiempo completo en Douglas Aircraft Company después de graduarse. Los primeros proyectos de Del Mar fue ayudar en los ensayos y la certificación del avión de pasajeros DC-3, pero rápidamente asumió mayores responsabilidades en el siguiente proyecto de Douglas, el cuatrimotor DC-4.

Diseñado como un sucesor más grande, más rápido y más potente del caballo de batalla DC-3/C-47, el nuevo Douglas estaba diseñado para operar a altitudes demasiado altas para que los humanos respiren con seguridad. A Del Mar se le asignó la tarea de liderar el desarrollo de un sistema de presurización y climatización que permitiría tanto a los pasajeros como a la tripulación volar cómodamente en mangas de camisa a altitudes de hasta 22 000 pies. Aunque los aviones presurizados se habían construido antes, el DC-4 sería el primer avión de pasajeros presurizado en ver una producción a gran escala. El innovador sistema de presurización de la cabina desarrollado por el equipo de Del Mar tuvo mucho éxito, y las regalías de las patentes, compartidas por Douglas con sus ingenieros como política, ayudaron a que Del Mar estableciera su propio laboratorio de diseño.

En 1952, Del Mar terminó una relación de 15 años con Douglas Aircraft Company y fundó Del Mar Engineering Laboratories. Del Mar Engineering se convirtió en un centro de diseño y fabricación para una variedad de productos de nicho. La compañía logró un éxito notable en la construcción de blancos remolcados para su uso en ejercicios de entrenamiento militar, lo que condujo a la construcción de una nueva fábrica en los límites con el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles.

DH-1

Su primer helicóptero due el DH-1, un pequeño monoplaza, que daría pie a desarrollar una versión de entrenamiento anclada a tierra.

Helicóptero cautivo Del Mar

A principios de la década de 1960, la demanda de entrenamiento para pilotos de helicópteros militares había crecido dramáticamente. Del Mar respondió con una solución innovadora: El Del Mar DH-2 Whirlymite. Sorprendentemente, aunque el DH-2 fue diseñado para la misión de entrenamiento, solo llevaba un estudiante piloto. Podría entrar dentro de la categoría de esos simuladores que son aviones diseñados para no volar, una solución de diseño similar al helicóptero cautivo de Cicaré.

Para la mayoría de las misiones, el pequeño DH 2, estaría unido a una gran plataforma, tipo aerodeslizador, debajo de él. Los gases de escape del motor del helicóptero se desviaban a la plataforma flotante, que estaba encadenada al suelo. El estudiante piloto podía entonces volar solo de manera segura, capaz de practicar maniobras básicas, como el vuelo estacionario, sin riesgo de estrellar la aeronave. Se construyeron cinco DH-2 y se entregaron a los militares como entrenadores.

DH-2 en acción

El DH-2, en su versión no cautiva, se empleó más ampliamente como un objetivo aéreo no tripulado, operado a distancia, para experimentos en artillería aérea. El DH-2 básico fue modificado para operación controlada por radio, y la estructura fue envuelta en una carcasa que tenía forma de helicóptero Bell UH-1 “Huey” escala 7/16. Estaba equipado con sensores capaces de detectar impactos de fuego de armas pequeñas. Después los helicópteros volaron en una serie de pruebas para predecir la capacidad de un helicóptero de tamaño para operar con éxito en un entorno hostil.

DH-2 como blanco aéreo

La última evolución de los helicópteros Del Mar fue el DH-20 de rotor en tándem. Concebido como un helicóptero de evacuación médica super-portátil, y plegable, el DH-20 estaba propulsado por dos motores de turbina y diseñado para transportar un piloto y dos pasajeros, o un piloto y un pasajero en una litera. El helicóptero podía plegarse para el transporte terrestre, marítimo o aéreo, y podía operar en zonas de aterrizaje mucho más pequeñas y confinadas que un helicóptero tradicional. Sin embargo, a medida que continuaron las pruebas del DH-20, la necesidad de una aeronave para tales misiones disminuyó, y la disponibilidad de helicópteros MEDEVAC convencionales aumentó, así que la aeronave nunca se puso en producción ni voló operativamente.

DH-20, foto de la wikipedia

Aunque el DH-20 fue el último helicóptero diseñado por Del Mar Engineering, la empresa siguió creciendo como un fabricante cada vez más capaz, de maquinaria altamente especializada.

A fines de la década de 1960, Del Mar comenzó la producción de elevadores hidráulicos de alta capacidad, capaces de mover cargas útiles de varias toneladas con una precisión sin precedentes. Estos ascensores resultaron particularmente útiles para el programa espacial de Estados Unidos; se utilizaba un conjunto de tres de ellos para levantar con precisión el transbordador espacial de la NASA para ubicarlo sobre su avión de transporte Boeing 747. También se utilizan para mover satélites y componentes de vehículos en toda la industria espacial.

Hoy, Del Mar Engineering y una compañía hermana, Del Mar Avionics, están ubicadas en una instalación en Irvine, California, construida originalmente para fabricar alas para el Concorde. El enfoque principal de la compañía se ha desplazado hacia los dispositivos de monitorización médica, pero se reservaron un lugar escondido entre sus oficinas y plantas de producción para preservar su historia. Hermosamente restaurados por un grupo de ingenieros veteranos de Del Mar, un DH-2 y el único DH-20 jamás construido estaban en exhibición para el afortunado personal, los clientes y otros visitantes. Ambos fueron donados y entregados hace unos 10 años a Hiller Aviation Museum.

Fuentes