Últimamente las noticias de inteligencia artificial utilizada para controlar aviones de combate nos están desbordando, en especial las que llegan del otro lado del Atlántico.
En esta ocasión le toca a la división más especializada y «secreta» de Lockheed Martin ha hecho público que también están trabajando en una inteligencia artificial que dote de autonomía a los drones en situaciones de combate real.
Las pruebas ya no se hacen en un ordenador con un simulador, aunque ha sido como se ha entrenado la IA. Esa IA entrenada en el ordenador está siendo transferida a aviones reales, los L-29 Delfín de origen checo, que están realizando combate real contra enemigos simulados.
A estas alturas ya sabéis la finalidad: tener un enjambre de aviones no tripulados que trabajan de manera colaborativa entre ellos y con aviones tripulados y que reciben órdenes de estos para ayudarlos, convirtiéndose así en puntos fieles que multiplican la potencia de cada vuelo con aeronaves especializadas en ataque a suelo, combate aéreo… como venimos contando cada vez que hablamos del concepto de puntos fieles.
IOWA CITY, Iowa, 5 de junio de 2024 /PRNewswire/ — Lockheed Martin Skunk Works® (NYSE: LMT) se asoció con el Laboratorio OPL de la Universidad de Iowa para demostrar el uso de inteligencia artificial (IA) en escenarios de intercepción aire-a-aire.
Los vuelos exitosos son un hito significativo para el equipo de IA Táctica de Skunk Works, en el que la IA voló directamente y llevó a cabo ejercicios tácticos con una aeronave a escala real en vivo, uno de los jets L-29 Delfin de OPL, utilizando comandos de rumbo, velocidad y altitud. El equipo llevó pruebas de combate real contra un adversario virtual, desde posiciones iniciales de ventaja y defensivas.
Se realizaron ocho casos de prueba por vuelo para ejercitar al agente de IA en una variedad de situaciones, desde iniciar el combate cara a cara, con misiles, en situación de defensa tras haber sido lanzados misiles… El equipo se sintió alentado al ver una transferencia limpia de comportamientos aprendidos de simulación a realidad y que el agente de IA parecía intencional y decisivo en sus acciones.
«Esta fue la primera prueba en vivo de la nueva interfaz de vuelo; es emocionante ver cómo los componentes separados se integran con éxito en el L-29 para demostrar nuevas capacidades. El sistema completo funcionó aún mejor en vuelo en vivo que en simulación,» dijo el Dr. Tom «Mach» Schnell, profesor de OPL en el Instituto de Tecnología de Iowa.
«Las pruebas de vuelo en vivo son un aspecto crucial para avanzar en nuestra experiencia en IA y autonomía. Estos vuelos son demostraciones poderosas de nuestra capacidad para desarrollar y probar rápidamente capacidades de IA operativamente relevantes y de manera asequible,» dijo Matthew «Gabe» Beard, gerente de ingeniería de autonomía/IA y aprendizaje automático de Lockheed Martin Skunk Works.
Estas pruebas de vuelo son parte de una iniciativa más amplia para desarrollar y probar rápidamente la autonomía impulsada por IA para misiones aire-a-aire. Se planean varias otras pruebas de vuelo para este año, construyendo sobre estos logros e incrementando la complejidad al introducir aeronaves adicionales en escenarios de contraataque aéreo ofensivo y gestión de batallas. Lockheed Martin está continuamente elevando el rendimiento de misión de IA en entornos simulados operativamente representativos, utilizando estándares de sistemas de misión abiertos para garantizar una amplia compatibilidad y una transición rápida con plataformas futuras.