En Brisbane, Australia, se celebra cada año en septiembre el festival Brisbane Riverfire. Es conocido por las pasadas a baja cota y en la ciudad, siguiendo el río, de las aeronaves de la Royal Australian Air Force.
Suele dejar espectaculares imágenes de los aviones volando cerca de los edificios, como los conocidos vídeos del C-17.
Pero en esta ocasión hay una diferencia, el vídeo que traemos no está grabado desde fuera del avión, ¡sino desde dentro! El propio Ministerio de Defensa australiano ha hecho público un vídeo de uno de sus Hornet volando a apenas 70m de los rascacielos de Brisbane.
¿Aviones de caza sin tren de aterrizaje y pistas de vuelo flexibles?¿Por qué no? El tren de aterrizaje pesa mucho, y el avión puede ser lanzado en una catapulta. Al eliminar el tren de aterrizaje se ganaba todo ese peso para combustible extra. Además, la carrera de aterrizaje es mucho más corta si se va sin tren. Así que genial para un portaaviones: mantenemos el gancho para retenerlo y quitamos el tren para que no ruede. ¿Suena loco? Pues lo intentaron los británicos sobre el HMS Warrior modificado.
Las pruebas fueron realizadas en 1948. Y, aunque la pista flexible de goma fracasó, se adoptó el esquema de cubierta de vuelo oblicua. Hasta entonces las cubiertas de despegue habían estado siempre alineadas con el eje longitudinal del barco. Desde estas pruebas se modificaron las cubiertas de vuelo llegando a la ya clásica configuración de cubierta de vuelo oblicua.
Si hubieran funcionado bien, se hubiera adaptado para el Supermarine Type 543, que podía operar tanto en tierra para la RAF o en el mar para la Navy.
Los primeros aviones a reacción tenían una potencia relativamente baja para la cantidad de combustible que demandaban sus sedientos motores. Una de las soluciones a las que se recurrió, como en el Me-163, fue la eliminación del pesado tren de aterrizaje. Y la idea persistió tras la guerra, como se puede ver en los vídeos que hay sobre estas líneas.
La idea de las pistas de aterrizaje flexibles para aviones sin tren fue presentada el 1 de enero de 1945 durante una conferencia de la RAF.
Y como las pruebas con aviones a escala fueron exitosas, se realizaron a escala real con Vampires modificados, primero en tierra, en las instalaciones del Royal Aircraft Establishment (RAE), y después en el HMS Warrior.
Las pruebas en tierra comenzaron en 1947, y el primer aterrizaje exitoso fue el 17 de marzo de 1948. El 3 de noviembre de ese mismo año fue el primer apontaje exitoso. Las pruebas siguieron hasta final de 1949.
Se realizaron más de doscientas tomas exitosas con este sistema, y se propuso modificar los futuros Sea Hawk para aterrizar sin tren.
Sin embargo el peso que se ahorraba en el avión por volar sin tren y el combustible extra, o las mejoras en las características de vuelo del avión por volar con menos peso, eran marginales. Mientras que modificar la flota a pistas flexibles era extremadamente caro. Por lo tanto se canceló el proyecto y no se continuó con él.
En mayo Bombardier presentaba su concepto de avión de negocios tipo BWB, ya sabéis, esa mezcla de avión convencional con fuselaje sustentador y ala volante, en la que el fuselaje deja de ser un tubo para convertirse en un cuerpo sustentador, y el ala y el fuselaje se fusionan de forma especialmente suave.
Ahora han hecho volar su segundo demostrador tecnológico, a escala 1:5, de 6.10m de envergadura.
“Hemos volado un modelo mucho más grande, con un tamaño de 20 pies”, dijo el director de investigación y tecnología de Bombardier, Benoit Breault, a FlightGlobal en el Foro Internacional de Innovación Aeroespacial en Montreal el 6 de septiembre.
“Con solo cambiar la forma de la aeronave hoy, creemos que podemos reducir [las emisiones] entre un 17 y un 20 %”, dice el director ejecutivo Eric Martel.
Bombardier enfatiza que EcoJet no es un programa de desarrollo sino un esfuerzo por comprender cómo funciona esta configuración y solventar los problemas que pueden aparecer.
“No hay prisa en Bombardier en este momento”, dijo Martel. «Eventualmente, tenemos que desarrollar el próximo avión… Tengo gente trabajando en eso hoy».
Breault dice que la cabina de un avión BWB sería demasiado baja para un reactor de negocios pequeño, pero perfecto para el sector de los más grandes, en el que Bombardier ahora compite con su serie Global.
En lugar de una cola en T, EcoJet tiene una cola en U con dos estabilizadores verticales. Tiene dos motores montados en la parte superior del fuselaje de popa. (comentario de Sandglass Patrol: Esto permite cambiar la configuración de los motores con sencillez, de turbofan a turbo-hélice o rotor abierto, aleja el ruido de la cabina y los estabilizadores verticales lo apantallan del exterior.)
La forma del fuselaje genera del 20 al 30 % de la sustentación total, en comparación con el 5 al 10 % de un avión tradicional, dice Breault. Eso significa que las alas pueden ser más pequeñas, reduciendo el peso y la resistencia y, por lo tanto, requieren menos empuje y combustible, agrega. Así es como Bombardier llegaría a un ahorro de combustible estimado del 20%. (comentario de Sandglass Patrol: además la suave inserción del ala en el fuselaje reduce la resistencia). Dice también Breault que el diseño podría usar motores turbofan tradicionales o sistemas de propulsión novedosos.
Quedan muchos obstáculos para que esta configuración sea viable, pero el fabricante de aviones dice que tiene soluciones para los desafíos técnicos y de certificación que, de momento, han ido encontrando. “No hemos encontrado nada que descarte el concepto”, dice Breault.
Breault dice que Bombardier completó sus objetivos originales de prueba de vuelo para el modelo más pequeño, pero continuará usando ese avión para evaluar tecnologías antes de trasladarlas al demostrador más grande. Sin embargo, la compañía se niega a decir dónde está realizando los ensayos de vuelo, ni a proporcionar detalles de financiación o de tiempos, diciendo que el progreso depende de los resultados de las pruebas. Se ha asociado en el programa con universidades canadienses no identificadas.
Breault dice que los desafíos técnicos han hecho que el concepto de diseño BWB no se haya popularizado antes. Cita la complejidad del control de vuelo, que la ubicación de la cola en U y el ala requieren «leyes de control completamente diferentes», que todos los estudios aerondinámicos y de control están desarrollados para aviones tipo fuselaje de tubo, que hay que realizar estudios sobre la velocidad de pérdida, la dificultad de presurizar fuselajes no cilíndricos o la imposibilidad de desarrollar familias de aeronaves simplemente cortando el fuselaje e insertando más secciones, aunque Breault dice que Bombardier ha encontrado una «solución» a ese problema, sin dar más detalles.
“Creemos que tenemos algunas formas sofisticadas de hacer que los números nos cuadren”, dice. “Me permito creer… voy a poner uno en servicio antes de jubilarme”.
El programa Ancillarybusca un avión experimental VTOL, y tiene como objetivo desarrollar y demostrar en vuelo las tecnologías críticas requeridas para dar un salto adelante en los aviones de despegue y aterrizaje vertical (VTOL), haciendo hincapié en su bajo peso en vacío y su alta carga útil, además de largos radio y autonomía.
El objetivo es construir un avión que pueda despegar desde las cubiertas de los barcos y pequeñas ubicaciones terrestres, en austeras en condiciones y climatología adversa, sin el equipo auxiliar de lanzamiento y recuperación que normalmente se necesita para estos sistemas.
Muchas empresas tradicionalmente no aeronáuticas han impulsado recientemente grandes inversiones en investigación de eVTOL, con configuraciones innovadoras, y en el desarrollo de su control de vuelo. Los avances en los sistemas de propulsión pequeños, las baterías de bajo peso y alta capacidad, las celdas de combustible, los materiales, la electrónica y la fabricación aditiva de bajo costo podrían permitir que se exploren nuevas arquitecturas y diseños en este espacio comercial.
ANCILLARY planea utilizar un enfoque multidisciplinar, que reunirá desarrollos de control avanzado, modelado aerodinámico y propulsión avanzada para resolver una combinación de objetivos de diseño desafiantes.
El próximo Día de los Proponentes y Expo el 20 de septiembre de 2022 no solo reunirá a los fabricantes de aviones tradicionales, sino también a los contratistas militares no tradicionales que han estado investigando soluciones comerciales VTOL.
Si la política hace extraños compañeros de cama, la guerra y la necesidad hace casi milagros, como que todas las armas del que otrora fuera tu enemigo, pasen a tu arsenal y las utilices como buenamente puedas.
Ése fue el caso de l’Armée de l’Air. Tras la Segunda Guerra Mundial internalizó todo lo que pudiera ser medianamente válido, como los Ki-43 en Indochina. En otros casos, terminó de producir los aviones que estaban a medias de montar en líneas de montaje francesas, como los Fw-190 renombrados NC-900. ¿Queréis saber más? Acompañadnos en este episodio.
pd: Si la intro y la despedida os son familiares, que no os sorprenda. En un ejercicio de nostalgia podcasteril he hablado con Javier Lago para pedirle permiso y utlizar la introducción que hizo para el que, si no recuerdo mal, fue el primer podcast español sobre aviación: Remove Before Flight RBF podcast