Antonov ha anunciado que construirá otro An-225

An-225 en sus buenos tiempos

El siete de noviembre de 2022, coincidiendo con la inauguración en el Aeropuerto de Leipzig/Halle, Alemania, de una exposición sobre los efectos de la guerra en Ucrania, y con el cumpleaños de Oleg Antonov, hubiera cumplido 116, la compañía hacía público que se construirá otra unidad de su gigantesco hexamotor Antonov An 225.

Los ingenieros de la compañía, tras realizar los correspondientes estudios, aseguran que con las piezas del segundo Myria, que se encontraba sin terminar, tendrían el 30% de los componentes.

Construir la aeronave supondría unos 500 millones de dólares.

El An-225 sufrió daños irreparables durante el ataque de Rusia a Ucrania, Hubo confirmación visual de su `pérdida en marzo de 2022.

Vía Aviation 24, Página de Facebook de Antonov

Bombardero B-1 haciendo un tonel

Festival aéreo de Aerospace Valley, octubre 2022, en la base aérea de Edwards. Un B-1 realiza una rutina consistente en un ataque simulado, y la termina con… ¡un tonel!

No es el primer bombardero que tenemos haciendo acrobacia, pues hay que recordar la técnica del toss-bombing, para lanzar bombas atómicas haciendo un rizo.

Y todos sabemos que un avión, por pesado que sea, cuando tiene tanta potencia y vuela sin carga, puede hacer maravillas…

Y, aún así, no dejarán de sorprendernos los aviones realizando estas maniobras.

Shin Maywa US2 demostrando sus capacidades STOL o avión del tamaño de un 737 volando como una Fieseler Storch

El hidro-anfibio japonés cuatrimotor Shin Maywa impresiona por su tamaño, o por su altura sobre el suelo cuando está en tierra.

Y sabemos, o hemos leído, que es una aeronave STOL, esto es, de despegue y aterrizaje cortos.

Pues bien, una cosa es leerlo y otra es comprobarlo. Y si el avión impresiona por su tamaño, más impresiona comprobar que una aeronave del tamaño de un B737 se comporta en despegue y aterrizaje como una Fieseler Fi 156 Storch.

¿Cómo lo hace? Pues soplando la capa límite del extradós del ala. ¿Recordáis cómo funcionaba el Turbo Wing?

Pues básicamente, funciona igual. La posición de la hélice ya hace que el aire que sopla la misma aguas abajo energice la capa límite. Pero, además, delante de los flaps hay orificios que permiten la salida de aire que es inyectado por un compresor, soplando de este modo el aire sobre los flaps, y forzando la circulación del aire sobre el perfil. Esto, igual que ocurría en el Turbo Wing, hace que las características de despegue y tomas cortas de estos gigantes sean tan espectaculares como deja ver el vídeo de arriba.

Esquema de funcionamiento del Turbo Wing

¡Ah! Y sí, este US-2 es el proyecto que se desarrolló ante la inviabilidad del avión de patrulla marítima con tren de aterrizaje de cojín de aire.

[Podcast] Ver y comentar Top Gun Maverick con el aerotrastornado y cinéfilo Alejandro Irausquin

Ahora que ya ha pasado algún tiempo podemos hacer este episodio sin espoilear la película a los que aún no la han visto, ¡porque dudo que a estas alturas quede algún aerotrastornado sin haberla visto!

Alejandro Irausquin es un ingeniero aeronáutico, aerotrastornado y cinéfilo total. Y, tras haber visto Top Gun Maverick, ambos coincidimos en que muchas de las escenas más icónicas de la película podían estar inspiradas en otras escenas icónicas del cine de aviación clásico: desde 633 Escuadrón a Águilas de Acero, Damm Busters o La gran evasión. Algunas os las contamos ya en nuestra crítica de la película. Y Alejandro incluso es capaz de encontrar otros paralelismos con otras películas menos conocidas. ¿Nos acompañas?

El podcast se puede enontrar en Amazon Music, Apple Podcast, Google Podcast, Ivoox, Spotify

pd: Si la intro y la despedida os son familiares, que no os sorprenda. En un ejercicio de nostalgia podcasteril he hablado con Javier Lago para pedirle permiso y utlizar la introducción que hizo para el que, si no recuerdo mal, fue el primer podcast español sobre aviación: Remove Before Flight RBF podcast

Boeing no lanzará un avión nuevo hasta la próxima década

Hace 7 años apostábamos a que no veríamos volar un avión nuevo antes de 2030, y parece que no íbamos desencaminados…

La conyuntura

Boeing, su CEO David Calhoun y reunión con los inversores. Muchas explicaciones que dar en una coyuntura bastante adversa: los problemas con el 737 MAX aún colean, la pérdida de confianza de la FAA, los problemas de falta de calidad durante la producción de varios modelos, los problemas logísticos de abastecimiento, la irregularidad en la cadencia de salida de aviones de las naves de montaje, la pérdida del primer puesto en el mercado aeronáutico y el segundo lejano puesto tras Airbus con un 40% del mercado, peor incluso si sólo miramos al pasillo único…

La noticia

Ante una audiencia de inversores y tal panorama, a David Calhoun no le quedaba más que decir que le gustaría que cada inversor pudiera recuperar todo lo invertido.

También dijo que Boeing no iba a lanzar ningún modelo interino para cubrir nichos. Que con la tecnología disponible actualmente la mejora sería pequeña, y para cuando lancen un avión nuevo se espera que mejore respecto a la generación actual entre un 20 y un 25%, tal vez un 30%, posiblemente con la capacidad de volar de forma autónoma. “Tal vez los primeros no vuelen de forma autónoma, pero tendrán esa capacidad”, añadiría.

Hizo notar también las inversiones de Boeing en Wisk, que acaba de hacer volar lo que auto-denominan eVTOL de sexta generación, y cómo todos los conocimientos adquiridos sobre vuelo autónomo de estas aeronaves sentarán las bases que la FAA utilizará en el futuro para certificar aeronaves comerciales autónomas, no tripuladas.

Fuente: AIN Online

Comentarios

Se ha dicho en muchos foros y medios en numerosas ocasiones que Boeing ya no es la empresa que era antes de absorber a McDonell-Douglas. A partir del 97 pasó de ser una compañía enfocada a la ingeniería a ser una compañía enfocada a sus inversores. Es decir, Boeing, paradójicamente, lleva casi 30 años copiando la estrategia que a MD le llevó a la ruina: reducir costes con recortes, y poner el énfasis en las ganancias y el valor para los accionistas en lugar de en el desarrollo de nuevos productos y la innovación.

El truco está en encontrar el equilibrio entre retornar a los inversores su dinero en forma de beneficios y usar los beneficios obtenidos en investigar y desarrollar nuevos productos para asegurar el futuro competitivo de la compañía. Y en este mundo de dinero rápido parece que muchos se olvidan, no solo en Boeing, de la parte de desarrollar las compañías a largo plazo, es suficiente con recuperar el dinero invertido lo más pronto posible.

Airbus se encuentra ahora mismo en una posición cómoda. El desarrollo de su familia NEO fue un acierto, así como la adquisición de los C-Series de Bombardier. Según Leeham News las ventas del A321NEO superan a las del 737-10 MAX por 4 o 5 a 1, mientras que las del 220 respecto al 737-7 serían de 2.5 a 1. No sería de extrañar que Airbus estuviera continuando el desarrollo inacabado del C-500, ahora como A220-500.

En un momento que parece ser un punto de inflexión en cuanto a la fuente de energía para los motores, cambio de queroseno por biocombustibles avanzados o SAF a corto plazo, hidrógeno a más largo plazo, es posible que no sea el mejor momento para lanzarse a diseñar un avión desde cero. Y sin un rival dispuesto a hacerlo, y que por tanto “obligue” a hacerlo para ser competitivo, es poco probable que Airbus lance un avión nuevo ahora: sería dar pistas a Boeing, o incluso darle margen de maniobra si el diseño fuera fallido. Por eso no sería de extrañar que Airbus se concentrara en el mercado militar, FCAS, Eurodrone, ¿qué tal una aeronave de patrulla marítima?, y en la investigación orientada al mercado civil, tanto en materiales como medios de fabricación y desarrollando tecnologías basadas en el hidrógeno y el SAF, posicionándose para lanzar una aeronave mucho más avanzada que la que pueda lanzar Boeing en el momento que ésta se decida a lanzarla.