Rusia podría utilizar biplanos de la era soviética para atraer la antiaérea ucraniana y así localizarla, para suprimirla a continuación.
El ejército ruso ha probado en silencio nuevas maneras de acabar con los sistemas de defensa antiaérea ucranianos usando biplanos AN-2 Colt de la era soviética.
Este avión, casi insustituible, es muy apreciado por su capacidad STOL y de vuelo lento. El AN-2 permitiría simular la incursión de un grupo de helicópteros o drones de ataque.
Es conocido que fuerzas rusas se han entrenado para usar biplanos anticuados como cebo para volar sobre las líneas del frente y atraer el fuego de las defensas aéreas ucranianas.
Videos recientes subidos a las redes sociales han mostrado al menos una docena de aparatos AN-2 en formación cerrada durante un ejercicio en las áreas fronterizas con Ucrania.
Se usó una táctica similar durante el conflicto entre Armenia y Azerbaijan sobre la disputada región de Nagorno-Karabakh. El ejército Azerbaijani convirtió un aparato An-2 en un UAV. Los sistemas de control remoto ocuparon el lugar del piloto humano en la cabina. El kit de control se podia instalar rápidamente.
No es el primer proto-drone que traemos a estas páginas. Ni el primero alemán. Es uno más que nos recuerda que, aunque los aviones militares no tripulados nos suenen a última tecnología, los drones, uav, aviones no tripulados… llevan con nosotros desde los inicios de la aviación. Y si cuando se habla de las armas maravillosas de la Luftwaffe de la Segunda Guerra Mundial se tiende a hablar de platillos volantes y otras armas inviables, esta no era precisamente una de ellas, anticipándose muchos años a máquinas posteriores, aunque sin encontrar su hueco en las doctrinas del momento.
En nuestra larga saga de portaaviones aéreos, básicamente aviones nodriza que pueden lanzar otros aviones, no es la primera vez que hablamos de drones lanzando drones. Pero posiblemente sí es la aplicación más espectacular que hemos visto, al ser dos aparatos de reconocimiento transportados y lanzados desde un MQ-9B, ¡así como la posibilidad de recuperarlos en vuelo! Podéis ver más detalles en el vídeo. Cabe destacar que es de propulsión híbrida, su gran autonomía, o el sencillo sistema de plegado del ala, que simplemente pivota sobre su punto central.
En una fase no tan avanzada de desarrollo, General Atomics tiene otro avión parásito no tripulado, esta vez con capacidad de transportar armas, un UCAV o avión no tripulado de combate. Podría ser lanzado desde aeronaves tripuladas (¿tal vez como los Gremlins?) o no tripuladas, como el MQ-1C Gray Eagle. Está siendo desarrollado bajo un contrato con DARPA.
El sueño de tener aviones nodriza con aeronaves parásitas (o portaaviones que vuelan) alimenta la imaginación de los ingenieros y de los militares desde casi el comienzo de la aviación.
El sistema de recuperación consta de un trapecio que se descuelga desde la rampa trasera de la aeronave. De este trapecio cuelga un cable junto con una cesta, que recuerda a los sistemas de repostaje de cesta y percha. Una vez que la aeronave parásita se aproxima a la cesta, despliega una percha, que al hacer contacto con la cesta queda cautiva. Una vez asegurada, pliega las alas y la aeronave es izada hasta el trapecio, donde es asegurada.
El 20 de enero de 2020 se produjo el primer vuelo del Gremlin. El 26 de agosto de 2020 Dynetics anunciaba un segundo vuelo exitoso. Sin embargo, en diciembre de 2020, cuando se realizó el ensayo de recuperación en vuelo, fue un fracaso. Tras al menos 9 intentos de recuperación desde el C-130 Hércules, finalmente hubo que recurrir al paracaídas de emergencia para recuperarlo.
Erickson está trabajando en un futuro no tripulado, u opcionalmente tripulado, para sus helicópteros.
En enero del año pasado Erickson y Sikorsky (Lockheed Martin)firmaron un acuerdo para incorporar la tecnología Matrix de Sikorsky, que ya vuela en el demostrador SARA, en sus helicópteros Skycrane.
La tecnología Matrix podría permitir al helicóptero operar de forma autónoma incluso de noche, y de esta manera utilizar los 10000 litros de agua en circunstancias que ahora mismo hacen a los pilotos quedarse en tierra.
La incorporación de esta tecnología en el Skycrane supone la introducción de un sistema fly-by-wire, y una nueva cabina, y ambos estan siendo ya incorporados junto con unas palas de material compuesto en la última versión que la compañía ha hecho de este helicóptero, el S-64F+ Elvis, que volará por primera vez en 2024.
Por supuesto, una tecnología tan de moda en el mundo militar no podía quedarse tan solo en una propuesta de helicóptero apagafuegos, y Erickson ha contactado también con el ejército estadounidense para ofrecerle una variante de transporte.
Un ejecutivo de Erickson ha dicho que las prestaciones de la aeronave en altura y con calor en el F+ han sido mejoradas: sólo con el cambio del rotor se incrementará en un 88% la carga útil, medida a 25ºC y 8000ft. La velocidad ascensional a carga máxima y 2000ft pasará de 1300ft/min a 2200ft/min. Y estas cifras mejorarán aún más con el nuevo motor. Para el F+ anuncian ¡Hasta 25000 libras de carga externa!
Y por supuesto Erickson se sube al carro de la mal llamada impresión 3D, o fabricación aditiva.
Cabe destacar que el US Army ya tiene experiencia en el empleo de helicópteros opcionalmente tripulados puesto que contaron con dos K-MAX que han volado más de 1000 misiones de combate y transportado más de 130000kg en situaciones de combate y ambientes donde hubiera sido peligroso arriesgar la vida de pilotos.
Junto con el Chinook Very Lare Helitanker es el segundo gran proyecto de apagafuegos nocturno autónomo que hemos conocido en los últimos tiempos. Y si bien en algunos entornos son vistos como una amenaza a la profesión de piloto de helicópteros, creemos que serán un complemento ideal para volar en condiciones en las que actualmente no se pueden arriesgar a volar los pilotos humanos: en incendios de noche, en condiciones de baja visibilidad o zonas de conflicto con pocas posibilidades de supervivencia.