Korea Aerospace Industries (KAI) dijo el martes que firmó un acuerdo de 1,96 billones de wones (1.410 millones de dólares) con la agencia estatal de adquisiciones de defensa para iniciar la producción en serie del KF-21 Boramae.
El contrato con la DAPA cubre un total de 20 unidades KF-21, incluido el apoyo logístico, manuales técnicos y capacitación.
Corea del Sur lanzó el programa de desarrollo del caza KF-21 con Indonesia en 2015, con el objetivo de adquirir un caza supersónico de producción propia para reemplazar su envejecida flota de aviones F-4 y F-5.
DAPA ha estado realizando varias pruebas de rendimiento en su flota de seis prototipos KF-21 desde que el primero realizó su vuelo inaugural en julio de 2022.
El caza tiene un fuselaje con diseño furtivo aunque las cargas, en un principio, irán en soportes exteriores en lugar de en una bodega interna, lo que lo hace menos furtivo que los cazas de quinta generación. Sin embargo su software y capacidad de comunicarse e intercambiar datos es más similar a un caza de quinta generación. Por eso suele considerarse un caza de 4.5 generación, aunque con capacidad de evolucionar.
Los motores serán los F414 de General electric, fabricados localmentebajo licencia por Hanwha Aerospace, que acaba de anunciar que inicia la fabricación de 40 unidades.
No es el primer avión supersónico coreano, pues el entrenador KAI T-50 ya alcanzó esa velocidad, pero el KAI T-50 se desarrolló de forma conjunta con Lockheed Martin y el KF-21 es de desarrollo íntegro coreano.
Se espera que entre en servicio en 2030, y Corea del Sur ha pedido ya 120 unidades.
Corea del Sur presenta tres nuevas variantes del caza KF-21 Boramae.
KF-21 Boramae (Halcón) se está desarrollando en tres variantes distintas: KF-21EA, EX y SA.
El KF-21EA tomará el KF-21B biplaza y acomodará una estación dedicada de Oficial de Guerra Electrónica (EWO) en la cabina trasera (altamente modificada). Estará equipado con dos dispositivos de Inteligencia Electrónica (ESM) y tres dispositivos de Ataque Electrónico (EA).
En cambio, el KF-21EX tiene como objetivo transformar el Boramae en un avión capaz de rivalizar con los aviones de combate de quinta generación. Esta variante incorporará una bahía interna de armas (IWB) para lograr este objetivo.
La tercera variante del Boramae, de exportación, denominada KF-21SA, se adaptaría específicamente a las necesidades de los clientes de exportación.
La piloto acrobática Narine Melkumjan ha compartido en sus redes sociales (que hayamos visto en Facebook, Instagram y Youtube) un vídeo que se ha viralizado en poco tiempo, hablando de la importancia de realizar bien las listas de chequeo y de volar estando en buenas condiciones de salud.
Lamentablemente, lo que tiene internet, se ha reenviado el vídeo después de descargado sin dar atribuciones a la autora, y eliminando toda la descripción del mismo, donde explica lo sucedido.
Como la autora ha deshabilitado el poder compartir el vídeo insertándolo,lo dejamos aquí enlazado el de Youtube, y en Facebook, y abajo el de Instagram. Pero traducimos debajo la descripción y la petición de precaución de la aviadora al resto de pilotos. Ya se sabe: aprende de los errores ajenos, pues no vivirás lo suficiente si pretendes aprender sólo de los tuyos.
Hace un par de años, durante mi segundo vuelo de entrenamiento en un día muy caluroso de verano, la capota del Extra 330LX que estaba volando se abrió en vuelo y se hizo añicos. Como puedes ver en el vídeo, fue una experiencia desafiante que podría haberse evitado si hubiera realizado una revisión visual adecuada antes de despegar. El pasador de bloqueo de la capota nunca había entrado en la posición de bloqueo y no lo noté durante mis comprobaciones.
También cometí el error de ir al campo de entrenamiento justo después de recuperarme del COVID, sin darle tiempo suficiente a mi cuerpo para recuperar fuerzas por completo. Además, volar sin protección para los ojos hizo que el vuelo fuera aún más desafiante de lo que ya era.
El vuelo fue una experiencia angustiosa, llena de ruido, dificultades respiratorias y visibilidad reducida. Me tomó casi 28 horas recuperar completamente mi visión. Aerodinámicamente, he experimentado algunos desafíos de control y turbulencias. Probablemente la parte más difícil fue mantener la potencia, cambiando así mi visión y respiración por energía cinética.
Aunque debido a todo el ruido era difícil escuchar lo que decía mi entrenador en la radio, una cosa que escuché fuerte y clara «sigue volando»
Si eres piloto y estás viendo esto, espero que mi historia te sirva como advertencia y que aprendas de mi error.
Lamento que me haya tomado tanto tiempo compartir este video. No es fácil exponer mis vulnerabilidades para que todos las vean. Sin embargo, me he dado cuenta de lo importante que es ser transparentes acerca de nuestras deficiencias y las lecciones que aprendemos a lo largo del camino.
A todos mis compañeros pilotos: vuelen con seguridad.
Narine Melkumjan
Consultado Iago López, del Centro Medico Pontevedra, ante la pregunta ¿Podrías explicar lo que sufren sus ojos y sistema respiratorio? nos contesta:
En los ojos es casi seguro una queratoconjuntivitis sicca (inflamación de la córnea por sequedad con la corriente de aire). En la vía respiratoria tengo más duras pero probablemente una inflamación traqueal por la inhalación de una burrada de aire seco con partículas de golpe. Las traqueítis cursan con una falsa sensación de asfixia muy desagradable pero inofensiva.
La maniobra de la Cobra la popularizó Pugachev cuando en pleno Paris Air Show en Le Bourget, 1989, hizo la cobra con su Flanker.
Desde entonces se ha discutido en muchas ocasiones su utilidad en combate, si realmente puede servir para despistar al adversario que te busca las seis y ganarle la cola, si no sirve de nada porque es una maniobra que te deja vendido de velocidad… pero no es ese el tema que vamos a debatir hoy.
También se suele decir que sólo el Flanker puede hacer esa maniobra, pero lo cierto es que el Fulkrum también podía, y que casi cualquier caza moderno es capaz de realizarla, más si tienen toberas vectoriales.
Pero tampoco vamos a entrar en ese debate hoy. Hoy os queremos traer las historias de dos cazas que ya podían realizar esa maniobra en los años 60 y 70, y que son menos conocidas. Si las dos fuerzas aéreas que desarrollaron la maniobra sabían de lo que hacía la otra o no, es difícil de saber, aunque presumimos que fueron desarrollos convergentes que llegaron a la misma maniobra en puntos distintos, sin saber unos de otros. Lo que sí parece es que los soviéticos aprendieron la maniobra de los unos, de los otros, o de ambos…
La cobra sueca
Estamos en los años 60, cuando empezó a volar el Draken. El comienzo de la vida operativa del Saab J35 Draken no fue precisamente fácil
La configuración de doble ala delta, una idea revolucionaria en ese momento, resultó ser una bestia difícil de domar. Con su naturaleza inestable y sin fly-by-wire ni estabilidad artificial alguna, manejar la aeronave a bajas velocidades era complejo. Más en fases críticas como la de aterrizaje. Sin embargo, como dice el refrán, no hay mal que por bien no venga. En este caso, el desafío presentó una oportunidad inesperada: el descubrimiento de una maniobra desconocida para casi cualquier otra nación en ese momento, la cobra..
Cuando el J35 Draken entraba en un pérdida a muy altos ángulos de ataque, los pilotos descubrieron que podían controlarlo jugando con los gases y la palanca. Y así nacía la «cobra sueca», realizada con el Draken, una maniobra que, en teoría, permite colocarse a las seis del caza perseguidor con facilidad. Y, lo bueno de que sea un hecho ya de los 60, hay vídeos en color.
Más o menos como los suecos, lo descubriría nuestro siguiente protagonista.
La «cobra» de Mohammad Mansour
Siria y Egipto estuvieron unidas durante un breve periodo de tiempo, en forma de la República Árabe Unida. Durante la unión se fusionaron sus fuerzas armadas. Y tras la ruptura de la unión, Siria tuvo que reconstruir su fuerza aérea desde cero.
Llamaron a puertas de países europeos para comprar Mirage, Fiat… pero al final solo encontraron la puerta abierta de la URSS, que aceptaba a venderles 34 MiG-21F-13, en junio de 1962.
Los pilotos eran seleccionados entre las filas de fieles al régimen, no fuera que desertaran con el avión después de saber volar, y eran formados por los soviéticos.
La formación soviética tenía fama de ser poco dada a la creatividad, y mucho a la rigidez y disciplina vertical. Cosa que encajaba mal con la actitud de pilotos jóvenes con ganas de «marcha» y de exprimir sus máquinas al máximo. Y es aquí donde entra en la historia nuestro protagonista, Mohammad Mansour.
Debido a la falta de conocimiento sobre tácticas y armamento, los comandantes de las recién establecidas unidades sirias de MiG-21 dependían en gran medida de los consejos y formación de alrededor de 30 asesores soviéticos asignados para ayudarles en su entrenamiento.
Sin embargo, unos pocos pilotos con buenos contactos, y que no podían «tocarles» por desobedecer, tenían la capacidad de hacer literalmente lo que quisieran, incluyendo desobedecer los consejos soviéticos y las órdenes de sus comandantes. Esto era especialmente válido para Mohammad Mansour, en ese entonces un piloto novato de MiG-21 recién salido de un curso en la URSS: su hermano mayor, el legendario Fayez Mansour, tenía buenos contactos en la cadena de mando en Damasco. Por lo tanto, Mohammad comenzó a desafiar los consejos de los asesores soviéticos y a exigir una mayor flexibilidad operativa para él y otros pilotos de su unidad.
Las experiencias de los primeros enfrentamientos entre MiG-21 sirios y la fuerza aérea israelí le enseñaron que era necesario un movimiento defensivo efectivo, diseñado para evitar los ataques de cañón. Cabe mencionar que a mediados de la década de 1960, el armamento principal de todos los cazas seguía siendo cañones y la mayoría de los combates aéreos se libraban en forma de dogfight.
La solución inicial de Mohammed se basaba en manuales soviéticos y consistía en giros descendentes rápidos, seguidos de tirar de palanca atrás a fondo mientras se encendía el postquemador. Sin embargo, en el transcurso de uno de los vuelos de entrenamiento, Mohammad tiró demasiado de palanca, cuando activó el postquemador, su MiG quedó en vertical, al borde de perder el control. Mohammad logró recuperarse a tiempo para evitar un accidente, pero fue un momento crítico: para evitar que esto volviera a ocurrir, decidió intentar repetir la maniobra, pero activando primero el post-quemador y después tirando de palanca, pues el Tumansky R-11 era conocido por reaccionar lentamente a la palanca de gases. Ese fue el momento en que nació lo que más tarde se conoció como la ‘maniobra de velocidad cero’.
Esa maniobra se convertiría en standard para los MiG-21 sirios, y parece que sería aprendida por pilotos de intercambio paquistaníes y egipcios. Y es de presuponer que acabaría llegando a los pilotos de MiG-21 soviéticos.
Y esto es curioso… porque un piloto iraquí de MiG-21 que conocí me había hablado de esta maniobra también, pero no la había visto documentada hasta que di con The Aviationgeek Club.
Durante ILA en Berlín, el Centro Aeroespacial Alemán (DLR) presentó un estudio conceptual de un avión de combate de última generación, moderno y altamente maniobrable, que forma parte del proyecto Diabolo financiado por el DLR.
El demostrador se utilizaría para explorar todo el espectro de configuraciones tripuladas y semiautónomas y, según el DLR: «El enfoque está en el diseño de un Demostrador Genérico de Caza del Futuro (DLR-FFD), que se utilizará para cerrar las brechas tecnológicas y demostrar la capacidad de diseño y evaluación de los métodos y procesos desarrollados en el DLR«.
La base para el diseño del DLR-FFD es un catálogo de requisitos emitido por el Ministerio Federal de Defensa para un futuro avión de combate alemán en la clase de tamaño de un Lockheed F-22.
Las características específicas incluyen bahías de armas internas, entradas de aire para separar las capas límite de la pared en la entrada del conducto del motor y el diseño del motor.
Envergadura: 15 m
Superficie alar: 100 m²
Alargamiento: 2,2
MTOW (Peso máximo al despegue): 35 t (8 t de carga útil)
Alcance: 1.100 Nm
Rango de Mach: 0–1,8
Altitud máxima: 50.000 ft
Carga alar: 422 kg/m² (MTOW)
Potencia del motor: 2 × 145 kN (sin post quemador) o 227 kN (con).
Socios del proyecto:
DLR-Instituto de Aerodinámica y Tecnología de Fluidos (Dirección del proyecto)
DLR-Instituto de Aeroelasticidad
DLR-Instituto de Tecnología de Propulsión
DLR-Instituto de Tecnología de Sistemas Aéreos
DLR-Instituto de Tecnología de Alta Frecuencia y Sistemas de Radar
DLR-Instituto de Dinámica de Sistemas y Control
DLR-Instituto de Metodología de Teledetección
DLR-Instituto de Tecnología de Software
DLR-Instituto de Materiales Compuestos, Ingeniería Ligera y Adaptrónica
DLR-Instituto de Arquitectura de Sistemas en Aeronáutica
Systemhaus Technik
Túneles de viento germano-holandeses (DNW)
Airbus Defence and Space
MTU – Aero Engines
En marzo ya habían presentado la maqueta, y en algunos foros como Secret Projects se habían publicado imágenes hace ya algunos años.
En 2021 os presentamos este proyecto de reconstrucción del Dornier Do X. Desde 2014, tras casi 8 años y 33600 horas invertidas por 112 estudiantes y Peter Kielhorn, un ex trabajador de Dornier, se empezó a fabricar la primera pieza, una gran cuaderna de 6 metros de alto y 4.6 de ancho.
Y se ha continuado con la viga principal de la aeronave. Tras la fabricación de la viga principal, se ha unido a la cuaderna que se había fabricado anteriormente, con lo que la estructura comienza a salir del plano de la cuaderna e invade la tercera dimensión, como dice uno de sus videos.
También se está trabajando con los instrumentos, y la obtención de planos de detalle del empenaje sigue a buen ritmo.
Esperamos tener pronto más noticias de este proyecto…