Hablando con Rodrigo Borjabad, piloto experto de Aeroprakts de la escuela de vuelo ULM Madrid, decíamos un día medio en broma medio en serio que los A-22 eran más adecuados para cazar drones con subfusil que los Yak-52. Son más pequeños, gastan menos y, sobre todo, no tienen que bajar flaps para bajar la velocidad y cazar al drone.
Y, dicho y hecho, ya han salido vídeos de los ucranianos cazando drones rusos con Aeroprakt A-22. Por el tablero de mandos, Rodrigo lo identifica como un A-22 de las primeras series. La gran puerta transparente del A-22 no lleva normalmente una portezuela tan grande como la que se muestra en el vídeo, con lo que entendemos que ha sido una adaptación de campo, sobre la marcha.
Lo raro, o curioso del vídeo, es que normalmente estos aviones se vuelan desde el lado izquierdo, siendo el ocupante del asiento derecho el copiloto y el que no tiene los instrumentos enfrente, ¡y en el vídeo es precisamente el del asiento izquierdo el que caza los drones! Podemos ver claramente cómo los instrumentos quedan más bien frente al portador del arma, que es el lado del piloto, y cómo en el lado del copiloto se han instalado unos instrumentos supletorios.
El inconveniente del empleo del A-22, que es una aeronave lado a lado en lugar de en tándem, es que o bien sólo se cazan drones desde un lado, o bien los ocupantes se turnan para disparar, en función de si quieren cazarlo por la derecha o por la izquierda. Vista la instalación de los instrumentos supletorios y la falta de «cuernos» en el lado izquierdo, en este avión han pensado en que el piloto vuele desde la derecha, mientras que desde la izquierda se cazan los drones. Actualizamos: se puede comprobar también en el vídeo que el avión lleva el sistema antiguo de mandos centrales en forma de Y, en lugar del más moderno sistema «con cuernos», más habitual en las unidades más modernas. Tal vez una correa o un soporte para el arma les ayudara a afinar la puntería.
Precisamente por noticias como la que tenemos sobre estas líneas, nos sorprenden cada vez menos las noticias de drones haciendo maniorbas acrobáticas básicas que pueden servir como maniobras evasivas, UAVs armados con miniguns, o los cuadricópteros haciendo combate aéreo para derribar mediante tarán a otras aeronaves no tripuladas. A este paso veremos al Dulus, ultraligero réplica del Tucano convertido en entrenador militar, con una ametralladora frontal.
El A-22 es un avión VLA/ULM, según la norma de certificación, y he tenido la suerte de volarlo en ULM Madrid, con Rodrigo Borjabad como instructor de vuelo. Por eso sé de buena mano que suele estar equipado con un Rotax 912 de 100hp, y que con él a 5000rpm se hace un crucero rápido de 180km/h, con un consumo de unos 18 litros de súper 95 cada hora, a MTOW. La masa máxima al despegue (MTWOW) oficial es de 600kg, aunque se sabe que puede despegar con más. Además es capaz de despegar desde pistas no preparadas en unos 160 metros (a 2000ft ASL, con el tren de aterrizaje convencional y sin hacer uso de técnicas de vuelo STOL)
La estructura básica es un fuselaje de tubo de acero soldado, carenado con fibra y paneles transparentes, con una estructura alar bi-larguero y con costillas, todo metálico, revestida en tela tensada, con un puro de cola monocasco, y un empenaje también revestido en tela.
(no deja de sorprendernos que este tipo de aeronave ligera pueda operar con tanta «impunidad», aunque sea sobre el espacio aéreo ucraniano).
Actualizamos: Gracias a Ajossi, un fiel oyente del podcast amigo Niebla de Guerra, identificamos el arma utilizada como un Malyuk —llamadoa veces Vulcan M—, que nos dice que es «un fusil tipo bullpup fasado en el Klashnikov… El pistolete está muy inspirado en el Tavor israelí (o si me apuras en el Steyr AUG)». Silver, otro seguidor de Niebla de Guerra, nos avisa de que el mismo fabricante del Malyuk ha desarrollado el RIFF, un sistema anti-drones por jamming. Aquiles Mo, otro fiel oyente de Niebla de Guerra, nos hace notar que el fusil va equipado con un caza vainas, similar al que se usa cuando se usan armas desde helicópteros, para garantizar aquello de «cabina estéril».
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