El 12 de noviembre, se inauguró la 15ª Exposición Internacional de Aviación y Aeroespacial de China en Zhuhai. Desde su inicio en 1996, este evento bienal ha sido la plataforma en la que China ha mostrado y promocionado su tecnología aeroespacial, al comienzo, poco a poco ha ido añadiendo más tecnología militar, fuera aeronáutica o no.
COMAC renombra el ARJ21 y presenta el C929
El día de Air China firmó un acuerdo con COMAC para ser el cliente de lanzamiento del C929, un avión de fuselaje ancho diseñado para rutas de larga distancia con un alcance de 12000 kilómetros y capacidad para 280 pasajeros. El C929 nació como avión de COMAC, se continuó como colaboración entre China y Rusia como CR-929, y volvió a ser exclusivamente Chino a partir de la Guerra de Ucrania. Ya fue presentado en el salón, en forma de maqueta, lleva varios años de retraso, ¡su desarrollo comenzó en 2011! y, actualmente, está en su fase de diseño preliminar.
El comunicado de prensa de Air China enfatizó la importancia estratégica de esta adquisición, describiéndola como un compromiso patriótico para fortalecer la industria de la aviación de China.
Este anuncio de Air China vino seguido de la intención de adquirir dos aviones Comac C919, el modelo de fuselaje estrecho de COMAC. (Fe de erratas: en el podcast decimos que este avión se certificó en occidente con la colaboración italiana y que voló con Aero México, pero ese fue el Su100).
La aerolínea ya ha comenzado operaciones comerciales con el C919. Para octubre de 2024, los C919 de Air China habían realizado 174 vuelos, cubriendo 389 horas de vuelo seguras y transportando a más de 23,800 pasajeros.
Además, Air China opera una flota de 31 aviones C909 (anteriormente el ARJ21, renombrado en esta feria), que han transportado colectivamente a más de 3 millones de pasajeros desde su introducción. El ARJ 21 es un avión regional, que también ha estado muy retrasado. Su desarrolló comenzó hace más de 20 años, su primer vuelo se produjo en 2008, pero por problemas con la certificación no pudo entrar en producción en serie, y por tanto no entró en servicio hasta 2016.
En el primer día del salón aéreo, COMAC también anunció una iniciativa de rebranding, renombrando su ARJ21 como C909. Con este movimiento, COMAC ahora tiene una estructura de nombres uniforme: COMAC C909, COMAC C919 y COMAC C929. Este rebranding estratégico refleja la ambición de COMAC de mejorar su presencia en el mercado y su reconocimiento internacional. Según el comunicado de prensa de COMAC, el C909 ha estado en operación comercial desde 2016, con 150 aviones entregados y más de 17 millones de pasajeros transportados.
Además, la noche anterior (11 de noviembre), el Grupo HNA emitió un anuncio indicando que su subsidiaria, Urumqi Air, ha firmado un acuerdo de compra con COMAC para 40 aviones ARJ21-700. El precio base para cada avión se establece en 38 millones de dólares, con un valor total de transacción que no excederá los 1.52 mil millones de dólares.
No se ha visto nada del C939 que presentaran a comienzos de año.
Aviones militares y drones
Notablemente, el evento coincidió con el 75º aniversario de la fundación de la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación (PLAAF), subrayando la importancia de este hito en la historia de la aviación de China.
En presentación China quería hacer destacar sus cazas furtivos.
El J-35A, anteriormente conocido como J-31 o FC-31, el último desarrollo de su caza furtivo. Hay quien lo compara con el F-35, otros dicen que tiene más del KAAN. Junto con el J-35A se podían encontrar los J-16 y J-20. Esta fue la primera vez que los tres aviones se vieron juntos, queriendo representar el progreso de la PLAAF y de la industria China en el despliegue de plataformas furtivas y colaborativas. El J-16 es un derivado del J-11, que a su vez deriva del Flanker. El J-20 es un desarrollo furtivo muy grande, hay quien dice que entraría más en el papel de avión de ataque o en el de misilero que en el de caza puro y duro. El J-35A es un caza furtivo multipropósito. Del J-20 se presentó también la versión biplaza, el J-20S. Los medios afines le definen como un logro por ser el único caza furtivo biplaza, muy maniobrable y con mucha capacidad de carga. Pero cabe plantearse por qué se necesita un segundo puesto en un caza de última generación, cuando en los cazas de última generación ese segundo puesto (el del RIO) está siendo reemplazado por IA, software y algoritmos. ¿No es tan avanzado como se nos dice y necesita un cerebro humano para suplir la tecnología que no tienen?
La Armada China también mostró sus aviones, incluyendo el caza embarcado J-15T, el helicóptero anti-submarino Z-9F y el avión de patrulla anti-submarina Y-8. El-J15T es la primera vez que se muestra con una barra de lanzamiento en catapulta. Hasta ahora este caza embarcado había recurrido exclusivamente a la fuerza bruta de sus motores y al sky-jump de los portaaviones para despegar. Destacar la presencia del J15D, un avión de guerra electrónica, equivalente al F/A-18 Growler.
En las exhibiciones aéreas, los asistentes presenciaron demostraciones de reabastecimiento en vuelo y asalto aéreo, con J-15 y Z-20J demostrando las avanzadas capacidades de aviación embarcada de China.
Por último estuvo presente el caza J-10CE, del que se ha dicho en muchas ocasiones, erróneamente, que es descendiente directo del LAVI.
El caza ruso Sukhoi Su-57 también fue noticia. Esta es la primera vez que el Su-57 ha participado en un salón aéreo fuera de Rusia. Llegando a China el 3 de noviembre, el Su-57 aterrizó en el Aeropuerto Jinwan de Zhuhai el 4 de noviembre, pilotado por el piloto de pruebas ruso Sergey Bogdan. Se ha destacado mucho la mala calidad de sus acabados, lo que no le impide volar pero sí le resta furtividad. También hay que aclarar que se trata de un prototipo, no de un modelo de serie.
En patrulla marítima destacó la presencia del Y-9Q, un avión de transporte convertido en avión ASW, con bodegas laterales.
Además de los sospechosos habituales, entre los drones, han destacado varios. Había muchas maquetas, de las cuales han destacado dos UAV de transporte de carga, siendo el W-5000 del tamaño del CASA C-295.
El “Jiu Tian” (High Sky), un avion no tripulado de 9 toneladas multipropósito, capaz de llevar carga, armamento y hacer de avión nodriza a otros aviones no tripulados o munición merodeadora. Su arquitectura recuerda al viejo He-162, con el turbofan situado dorsalmente en el fuselaje, y con doble timón, en los bordes marginales del timón horizontal, para dejar paso a la pluma de los gases de escape.
Siguiendo la tendencia generalizada de los «puntos fieles«, ha hecho presencia el FH-97A, pensado para la colaboración de aeronaves tripuladas y no tripuladas (MUM-T).
El CH-7 es un UCAV con forma de ala volante que recuerda al RQ-170 o al X47-B, que ya se ha convertido en un viejo conocido de los analistas de defensa.
Espacio
La misión Chang’e 6 de China, que recolectó con éxito muestras de la cara oculta de la luna a principios de este año, exhibió su cápsula de retorno y muestras por primera vez. Los visitantes tuvieron la oportunidad única de ver las muestras de suelo lunar traídas de esta misión histórica.
Otro debutante destacado fue Haolong, el avión espacial de de China, un transbordador espacial que dicen que proporcionará transporte de carga a bajo costo a la estación espacial china. El vicepresidente de AVIC, Zhang Jichao, señaló que Haolong representa un avance significativo en la tecnología de transporte espacial reutilizable de China, allanando el camino para soluciones logísticas espaciales rentables.
El Baidi estuvo presente como maqueta a tamaño real. Es un concepto de un avión de caza de sexta generación que dicen que podrá operar tanto en la atmósfera como en el espacio.