Gracias a Aviation Week hemos descubierto estas patentes de Airbus en Estados Unidos: patentes número 7819358, D624480 y D624868.
Lo que sorprende es que en ninguno de los dibujos, que podrían perfilar el airliner del futuro, aparezca algo parecido a un ala volante o un cuerpo sustentador. Se tratan de fuselajes convencionales, con configuraciones atípicas de empenaje y cabina. Tan solo la última configuración es un poco más ‘arriesgada’. Por otro lado, tampoco nos sorprende no encontrar más que fuselajes tubulares, por los problemas que hemos expuesto en otras ocasiones: el límite psicológico que supone convencer a un pasajero de que compre billetes para subirse a una ‘cosa’ que no se parece a lo que le dijeron que se tenía que parecer un avión, y el problema de las distancias a las salidas, a la hora de cumplir los tiempos mínimos de evacuación.
Ahora vamos a echar un ojo a las 3 patentes que enlazamos atrás.
En la primera de las patentes observamos un avión de pasajeros sin estabilizadores ni timones. En su lugar está montada una hélice entubada con un carenado que aisla del ruido del motor, reduciendo el impacto. La hélice entubada está montada en un Cardan, lo que permite vectorizar el empuje y prescindir de los estabilizadores y timones. También se contempla la posibilidad de montar dos motores en paralelo, con hélices contrarrotantes.
La segunda patente de la que vamos a hablar se trata de una nueva disposición de la cabina. El resultado es parecido al Beluga, donde la cabina se desplaza hacia abajo, y el espacio de carga queda en una cubierta superior. De este modo la cabina de pasajeros quedaría sobre el cockpit, y llegaría hasta la misma proa del avión.
La última propuesta es tal vez la más radical. Se trata de un avión de línea con las alas en flecha negativa y canard, con una doble cola del estilo del B-25, o mejor, del A-10, con la cola apantallando los motores, aparentenemte tipo prop-fan, para asi disminuir los ruidos.
