No es el primer proto-drone que traemos a estas páginas. Ni el primero alemán. Es uno más que nos recuerda que, aunque los aviones militares no tripulados nos suenen a última tecnología, los drones, uav, aviones no tripulados… llevan con nosotros desde los inicios de la aviación. Y si cuando se habla de las armas maravillosas de la Luftwaffe de la Segunda Guerra Mundial se tiende a hablar de platillos volantes y otras armas inviables, esta no era precisamente una de ellas, anticipándose muchos años a máquinas posteriores, aunque sin encontrar su hueco en las doctrinas del momento.
El Argus 292, nombre dado por el fabricante, nació como blanco aéreo. Lo desarrolló la compañía Argus, fabricante de motores de aviación, como el que motorizaba la Fieseler Storch. El nombre que le dio el ejército fue Flakzielgerät 43.
Se trataba de un avión de vuelo libre de 2.30m de largo y 2.40 de envergadura, con un pequeño motor de 70cm³ y 3hp. El gran diedro del ala le garantizaba la estabilidad ante perturbaciones externas. Para asegurar esta estabilidad, el avión también contaba con alerones y timones de profundidad y dirección controlados de forma automática por una serie de resortes.
Estaba diseñado para que a la artillería anti-aérea le pareciera un avión más grande volando a mayor altura y pudiera afinar su puntería con fuego real. La estructura básica era un fuselaje formado por un tubo metálico, un compartimento para el motor, y ambas alas con gran diedro. Alas y superficies de control eran enteladas, para abaratar costes y ahorrar peso. La masa al despegue era de unos 23kg.
Su primer vuelo se produjo el 9 de junio de 1937. Aunque las especificaciones decían que debería alcanzar una velocidad de 100km/h, tenía un crucero más realista de 70-80km/h.
Como el aparato no tenía controles propiamente dicho, no era un blanco difícil para los artilleros. El avión no podía realizar maniobras evasivas ni improvisar durante el vuelo. La solución era obvia: convertirlo en radio controlado. Sin embargo los equipos de aquella época no eran precisamente pequeños, así que el avión tendría que esperar a 1939 para ser controlado de forma remota. El equipo de radio-control pesaba 3kg.
El 14 de mayo de 1939 realizaría su primer vuelo radio controlado. Pero entonces se había convertido en una máquina demasiado cara para ser destruida de forma masiva en prácticas de artillería. Así que se le buscaron otras aplicaciones.
No contaba con ningún sistema de visión por TV, así que el avión tenía que permanecer siempre dentro del rango de visión del piloto remoto, aun con ayuda de prismáticos, lo que limitaba el alcance efectivo a 10-12km.
La evacuación de heridos o el transporte tampoco eran factibles, debido a su tamaño y capacidad de carga. Por tanto solo quedaba una aplicación factible: el foto reconocimiento. En el cometido original del avión no se había contemplado la recuperación del mismo. Sin embargo, en una misión de fotorreconocimiento la recuperación del As 292 era vital, por lo que se le instaló un paracaídas que se podía activar de forma remota. Si no era posible aterrizarlo de forma segura el operador podía apagar el motor y disparar el paracaídas.
Equipado con cámaras demostró ser útil para este propósito. Así que el ministerio de aviación realizó un pedido de 100 unidades.
Para el modelo de serie se simplificó el tren de aterrizaje, se introdujo un motor de 140cm³ y 7hp que le permitía alcanzar los 100km/h, y se cubrió el fuselaje delantero, carenando el motor y el sistema de radio. Se aumentó su peso máximo al despegue hasta los 27 kg, lo que permitió aumentar la capacidad de combustible para media hora de autonomía, y una segunda cámara.
Para 1941 Alemania estaba sumida en una guerra total, Argus estaba centrada en la producción de aviones, y le hubiera llevado un año poder cumplir con el pedido de 100 aeronaves, pudiendo comenzar las entregas para 1942.
El desarrollo se inició como blanco aéreo para la artillería, con un diseño del Dr. Ing. Fritz Gosslau, de Argus en 1937. También se involucarían en el desarrollo Lorenz (compañía de radio) y el DFS (instituto alemán para el desarrollo del vuelo a vela), y sería finalmente producido en serie por Argus.
No hay registros de su uso en combate, tal vez porque quedaran destruidos, o porque con la mentalidad de la época no se entendieran las ventajas de unos juguetes así habiendo aviones de verdad, o porque comprobaron que era más sencillo de lo que parecía interferir las señales de control… o todo ello junto y casi todos acabaron cogiendo polvo en un almacén.
- Longitud: 2.30 m
- Envergadura: 2.40 m
- Superficie alar: 1.20m²
- Potencia: 3-7 hp
- Vcrucero: 70-100 km/h
- Peso: 23-27 kg
- Carga útil: 1-2 cámaras de película