Los aeropuertos no fueron siempre como los conocemos ahora. En tiempos no había pistas de asfalto, si no de hierba o tierra. De hecho, no tenía que haber pistas: uno despegaba en la dirección que le convenía. ¡¡Nunca tenían problemas con el viento cruzado!!
Por eso los aviones tenían grandes ruedas. Si llovía había barro, se atascaban o volcaban si tenían ruedas pequeñas. Cuando fueron creciendo en tamaño y en velocidad, fue conveniente el uso de pistas, por seguridad, porque era inviable tener terrenos cuadrados tan grandes y además se desaprovechaba mucho el espacio… Así que se empezaron a construir pistas alineadas con las direcciones predominantes del viento.
Pero esta entrada solo era para ver cómo eran los aeródromos antes de lo que todos conocemos…