Sabéis que venimos haciendo hace un tiempo un seguimiento cercano a los desarrollos aeronáuticos turcos. En concreto, el ANKA-3 es su UCAV con forma de ala volante furtiva, con bodega interna de armas, pero también con soportes externos.
Y, por primera vez, ha sido visto en vuelo armado, con munición en uno de sus pilones. En concreto se trata de una bomba «tonta» Mk-82 con un kit Teber-82 que la vuelve «inteligente», añadiendo un sistema de control, guía por gps y un buscador láser semi-activo.
Durante el vuelo, que realizó el 1 de septiembre, se llevaron a cabo diversas pruebas, como la de retracción de tren, además de la de integración de cargas externas, como es el caso de la ya citada bomba.
El ANKA-3 es un avión de ataque no tripulado subsónico, con velocidades máximas de Mach 0.7 y de 0.42 de crucero. Aunque se espera que su versión definitiva, con dos motores, sea supersónica. Tiene un techo de servicio de 40000ft, una masa máxima al despegue de 6500kg y una carga útil de 1200, que le daría una autonomía de 10h. Se espera que vuele en cooperación con el caza KAAN, antes conocido como TF-X y con el avión no tripulado Kizilelma. Y no sería descartable verlo sobre el Anadolu.