Los beneficios del Sol son de sobra conocidos. También los beneficios médicos. Paseos por el campo, al aire libre, respirar aire limpio, y Sol. Así que, ¿por qué no poner un hospital en las nubes?
Allá por el año 1930 fue cuando un abogado francés, llamado Charles L. Julliot propuso llevar a tuberculosos y otros enfermos en aviones o dirigibles hasta altas cotas para que les diera el sol y el aire. En Estados Unidos se oyó tal propuesta y el Dr. Ing. Karl Arnstein, ingeniero jefe y vicepresidente de la Goodyear-Zeppelin Corporation, responsable del diseño del dirigible más grande de la marina estadounidense, el Akron, explicó a Modern Mechanix como podría diseñarse semejante aeronave-hospital, y con estos datos prepararon la siguiente imagen: