Toca renovar la flota de helicópteros, y toca innovar en sus diseños. Ahí están los seleccionados durante el concurso JMR estadounidense, el X-2 de Sikorsky o el X3 de Eurocopter, ahora Airbus Helicopters. Los ejércitos o los usuarios de helicópteros como aeronave ejecutiva quieren ir más rápido. Despegar y aterrizar en vertical, pero ir más rápidoq ue con un helicóptero convencional. De ahí la necesidad de los helicópteros compuestos. Ya se intentó con el AH-56 Cheyenne… y ahora vuelve a las mesas de diseño, con más experiencia, nuevos materiales y tecnologías que pueden convertirlo en el helicóptero del futuro.
Boeing está trabajando en el JMR junto con Sikorsky. Y ahora ha presentado esta petición de patente. Se trata de un helicóptero compuesto «desmontable». Uno que pueda funcionar como helicópteor convencional y también como helicóptero compuesto, desmontando las alas embrionarias y los rotores que lo propulsan. Algo así como el X3 de Airbus, pero con la parte de avión desmontable.
Alguno me ha preguntado el sentido de este diseño. Supongo que no es ni más ni menos que tratar de tener una linea de montaje que pueda producir ambos productos de forma sencilla, principalmente, y permitir que algunos operadores puedan configurar sus aeronaves en función del trabajo a realizar.