Un amigo mío me decía que en Rusia todo es grande. También los aviones (ver An-225). Y los helicópteros. Estoy hablando del Mi-26. Es ‘hijo’ del Mi-6, que de por sí ya es enorme. Es como si lo hubieran mirado con lupa, el Mi-6 aumentado de tamaño.
El Mi-6 tiene un rotor principal de cinco palas movido por dos motores de más de 4000kW (más de 5000HP) y el Mi-26 tiene dos motores aún más potentes… de unos 8500kW (más de… ¡¡11000HP!! cada uno). Con este tamaño el Mi-6 es multiusos, desde grúa volante a transporte de carga pesada, transporte de tropa (de 65 a 90 personas, según se acomode la carga y su equipo) evacuación médica (41 camillas), o avión apagafuegos. Podeis apreciar en la fotografía que lleva unas alas embrionarias. En vuelo en estacionario no sirven más que para estorbar el flujo de aire bajo el rotor, pero en vuelo de avance sirve para descargar de peso al rotor (parte del peso lo soporta el rotor y parte las alas, con su sustentación).
Si los datos del Mi-6 son impresionantes los del Mi-26 son escalofriantes. Como su hermano, por su tamaño y potencia, es todo un multiusos. Y si creemos a esta página es tiene la misma capacidad de carga que un Hércules.
Y aunque parezca impresionante… NO ES EL HELICÓPTERO MÁS GRANDE DEL MUNDO. Sí, en el título dice bien. El Mi-6 es el más grande construido en serie. El más grande del mundo es otro helicóptero ruso, de la misma fábrica, el Mil V-12, en el que para ahorrar costes de desarrollo se usaron dos rotores de Mi-6, así como dos grupos motores del Mi-6. El segundo prototipo vatió ¡¡7 records mundiales!! (el primero se estrelló). Por ejemplo, levantó 31030kg de carga de pagoa 2951m, rompiendo el record de máxima carga subido hasta 2000m, unos meses después batió su propio record con 40204kg.