Lockheed Martin no es nuevo en esto de los aviones muy rápidos. De hecho su SR-71 sigue siendo, 50 años después, una aeronave futurista y la más rápida de las producidas como producto en serie, no demostrador tecnológico vamos. En 2013 Lockheed desveló lo que sería el sustituto no tripulado del Blackbird, el SR-72 y dijo que pretendía tener listo para 2020 una aeronave hipersónica reutilizable. Ahora el SR-72 vuelve a escena tras el anuncio hecho por Lockheed Martin el pasado martes (15/03/2016) en Washington.
Lockheed Martin habló acerca de un nuevo vehículo hipersónico «asequible» para validar nuevos conceptos de propulsión que le permitirían alcanzar entre Mach 6 y 20. Marillyn Hewson, chief executive de Lockheed, dijo en Washington que la compañía está construyendo una aeronave capaz de volar de forma estable y controlable en régimenes subsónico, supersónico e hipersónico basada en los avances hechos durante la breve vida del demostrador tecnológico HTV-3X Blackswift (fue cancelado por el congreso en 2009).
Hewson dijo, mientras se mostraba la imagen del SR-72, que costaría menos de mil millones de dólares desarrollar un demostrador tecnológico del tamaño de un F-22 Raptor. El motor sería el concebido por Lockheed para su SR-72, un reactor híbrido que funcionaría como un reactor convencional para acelerar hasta Mach 1.5 o 2 y como un estatorreactor por encima de esta velocidad.
Según el director de Skunk Works, Rob Weiss, aunque el demostrador sería no tripulado al comienzo el objetivo a largo plazo de la compañía sería tener un avión de pasajeros hipersónico (como el propuesto por Airbus) y un fácil acceso al espacio, en la rama civil, y un avión de reconocimiento o incluso de caza o bombardeo en su vertiente militar.Weiss también dijo que el gobierno estadounidense ha mostrado algún interés,y que DARPA podría querer continuar donde lo dejó con el Blackswift.
El gran reto son los motores, pues los turborreactores funcionan bien hasta Mach 2.2 mientras que los estatorreactores no funcionan bien por debajo de Mach 4. Hewson y Weiss dijeron que Lockheed estaba invirtiendo en el desarrollo de vehículos hipersónicos y materiales resistentes a las altas temperaturas, pero no explicaron cómo lograrían esta transición, más allá de referirse al motor combinado descrito algunas líneas más arriba.
Lockheed trabaja también en armas hipersónicas, como misiles lanzables desde lanzamisiles convencionales, propulsadas por cohetes y espera poder realizar algunos ensayos en 2018, desarrollaría los aviones a partir de 2020 y cree que podrían entrar en servicio para la década de 2030. Aun así Lockheed le iría a la zaga a los chinos, que han ensayado con éxito en varias ocasiones su demostrador hipersónico DF-ZF y sería interesante saber en qué punto se encuentran respecto a Boeing, que ya concluyó sus ensayos con el X-51 Waverider.
vía Flightglobal y Space Daily . Imagen del motor del SR-72 vía Extrem Tech.