Antonov ha completado las tareas más urgentes de recuperación y preservación de las partes que puedan ser re-aprovechables, y la evaluación de los trabajos continuará con intención de reconstruir el avión después de la guerra.
Piezas que se sumarían a las que quedaban almacenadas del segundo An-225 que nunca se terminó. Los ingenieros de la compañía, tras realizar los correspondientes estudios, aseguraron que con las piezas del segundo Myria, que se encontraba sin terminar, tendrían el 30% de los componentes.
Los trabajadores de la empresa Antonov han finalizado la evaluación del daño del avión An-225 Mriya destruido, la cual se tenía que llevar a cabo lo más rápido posible para preservar las piezas intactas. Actualmente, la compañía no piensa en su reconstrucción pues concentra sus recursos en «tareas más prioritarias para el estado».
El trabajo se ha financiado con un fondo especial para la reconstrucción del Mriya. La gran mayoría de este dinero fue recibida por la empresa como regalías de las ventas del modelo An-225 del simulador de vuelo Microsoft Flight Simulator 2020.
Microsoft, en colaboración con el estudio iniBuilds de Londres, Reino Unido, decidió utilizar un add-on del Antonov An-225 para MSFS2020 para recaudar fondos. La recreación de MSFS2020 se realizó en colaboración con empleados actuales y antiguos de Antonov para garantizar la precisión del modelo de vuelo, y se lanzó en febrero de 2023.
El costo exacto del nuevo avión An-225 aún no se ha calculado. Este dependerá, entre otras cosas, de si Antonov puede utilizar piezas que tenían en común con los aviones An-124 Ruslan, en concreto las que procederían de los embargados a los rusos en Canadá y Alemania. En 2022, cuando Antonov anunció que produciría un nuevo An-225 estimaban que el precio de la reconstrucción sería de 500M$.
Liberty Lifter es un proyecto de DARPA que llevamos siguiendo desde hace algo más de dos años. Se trata de un vehículo de efecto suelo, (wing in ground vehicle o WIG para los estadounidenses), aunque el nombre que más solemos asociar a este tipo de aeronaves es el que le dieron los rusos: ekranoplano.
Además, debe concebirse como aeronave de bajo coste para romper con la tradición de los programas de adquisición de aeronaves, incluso utilizando materiales «exóticos» en aviación, es decir, poco utilizados tradicionalmente en aviación, pero de más bajo coste. (¿Acero inoxidable, tal vez?)
La propuesta de Aurora, es una configuración bastante convencional, con un fuselaje y ala alta, y flotadores de punta de plano para estabilizar el avión en el agua, y bebe de la experiencia de Boeing en el desarrollo de su Pelikan.
El programa centra el foco en tres aspectos:
Operaciones marítimas ampliadas: Se hará hincapié en el funcionamiento en estados de mar turbulentos mediante la creación de capacidades STOL para reducir la carga de impacto de las olas durante el despegue/aterrizaje y nuevas soluciones de diseño para absorber las fuerzas de las olas. Además, el proyecto abordará los riesgos de colisión del vehículo durante el funcionamiento a alta velocidad en entornos congestionados. Por último, el objetivo es que el vehículo funcione en el mar durante semanas, sin actividades de mantenimiento en tierra.
Fácil industrialización a gran escala y bajo coste: La construcción dará prioridad a los diseños sencillos y baratos de fabricar frente a los conceptos complejos y de bajo peso. Los materiales deben ser más asequibles que los de la fabricación tradicional de aviones y estar disponibles para ser comprados en grandes cantidades.
Controles complejos de vuelo y en el mar: Se desarrollarán sensores y esquemas de control avanzados para evitar las grandes olas y gestionar las interacciones aerodinámicas e hidrodinámicas durante el despegue y el aterrizaje.
Los objetivos incluyen el despegue y el aterrizaje en el estado del mar 4, la operación sostenida en el agua hasta el estado del mar 5 y operar como ekranoplano o vehículo de efecto suelo y como avión, con un techo de 10000ft sobre el mar (ASL).
Inicialmente, DARPA imaginó que Liberty Lifter tendría aproximadamente el mismo tamaño y capacidad que un C-17 Globemaster, pero desde entonces ha reducido el tamaño del demostrador hasta el de un C-130 Hércules. Sin embargo, los documentos presupuestarios de DARPA para el año fiscal 2025 muestran que un futuro Liberty Lifter más grande podría construirse escalando el tamaño del demostrador tecnológico hasta el de un C-17.
El nuevo video muestra el Liberty Lifter en acción, aterrizando en el mar en una ubicación remota de una isla y descargando vehículos anfibios blindados pesados antes de despegar de nuevo. Un punto muy interesante es que muestra cómo para mantener el crucero en vuelo dentro del efecto suelo sólo necesita la mitad de sus motores en funcionamiento, llevando los otros 4 parados y con su hélice abanderada, aunque sí usa los ocho durante su fase de despegue, hasta que se libera de la resistencia del agua.
Según Aurora, su trabajo en la construcción del avión X, con una envergadura de 65 m (213 pies) se encuentra en la Fase 1B, que incluye actividades de prueba que culminan en una revisión preliminar del diseño. Además, se han realizado pruebas en centros hidrodinámicos para evaluar el diseño en el estado de mar requerido y pruebas en túneles de viento para el rendimiento de la hélice. La Fase 2 implicará una revisión crítica del diseño y la Fase 3 en 2026 implicará la construcción del avión X. El avión final, programado para volar en 2028, tendrá una capacidad de carga de 81,000 kg (180,000 libras).
Como hemos comentado en más de una ocasión en el podcast con nuestro amigo Carlos, creemos que el teatro de operaciones estadounidense del futuro va a ser marítimo, concretamente en la zona de Taiwan, así que necesita vehículos que pueda desplazarse a gran velocidad hasta la isla. Y esta aeronave, pensada para no volar más que rascando el agua, podría ser una buena solución: gran capacidad de carga a alta velocidad. Y además, DARPA solicitaba que fuera con materiales no habituales en aeronáutica, así que imaginamos que se estará pensando en acero inoxidable, más resistente a ambientes marítimos que el aluminio.
Liberty Lifter llena un vacío crítico entre las capacidades actuales de transporte aéreo y marítimo. El desarrollo en este espacio hará avanzar las operaciones estratégicas en el mar, y estamos orgullosos de trabajar con DARPA, Boeing y nuestros socios para impulsar esta tecnología. Mike Caimona, presidente y CEO de Aurora Flight Sciences
O desarrollar una plataforma común y barata para aeronaves no tripuladas que, por cuyo coste, no nos importa perderlas y por tanto podemos considerarlas fungibles.
El programa de LCAAPS (Low Cost Attritable Aircraft Platform Sharing) se inspira en la biología y explota el concepto de “género” y “especie”, esto es, desarrolla un sistema base común para construir un gran número de sistemas no tripulados económicos y adaptados a roles específicos, logrando un volumen de producción grande pero asequible, indispensable para los conceptos de enjambre (y de vencer por saturación; sí, volvemos al tema de los puntos fieles y los enjambres).
El LCAAPS, además de inspirar su arquitectura en la biología, quiere inspirar su sistema de producción en la insutria automovilistica, con líneas de fábrica automatizadas donde brazos robóticos ensamblan los drones en cintas transportadoras.
LCAAPS está desarrollando múltiples sistemas aéreos no tripulados a partir de una plataforma base, aplicando un enfoque de arquitectura de sistema modular y abierto para lograr la máxima comunalidad y agilizar el proceso de diseño y desarrollo. Se espera que esto permita al proyecto lograr una masa asequible pero creíble, produciendo ACPs no tripulados, económicos y adaptados a roles específicos que complementen vehículos más ‘exquisitos’, incluidos los cazas tripulados.
Los sistemas son modulares, basados en esa célula común, y dotados de una arquitectura de sistemas abierta que favorece la escalabilidad y el crecimiento de la plataforma mediante actualizaciones del sistema, manteniendo un ‘bajo costo’.
Escabilidad, plataforma abierta y low cost se han convertido en mantra en las doctrinas de diseño de armas actuales.
El Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL) ha lanzado un nuevo video conceptual de su programa LCAAPS, mostrando un dron “madre” autónomo y sus aeronaves no tripuladas colaborativas realizando misiones aire-aire. El AFRL llama a estos sistemas Plataformas Colaborativas Autónomas (ACL).
El video muestra cinco drones, con un UCAV principal al mando flanqueado por dos puntos, drones autónomos colaborativos, a cada lado, enfrentando juntos un objetivo aéreo hostil.
El dron principal dispara un misil aire-aire (AAM) transportado externamente que impacta un objetivo. El UCAV de ala delta doble lleva cargas externas en puntos duros de las alas, lo que indica que la furtividad podría no ser una prioridad en este programa. Tener un UCAV furtivo aumenta el costo de desarrollo y producción, y no es rápidamente escalable, lo que va en contra de los fundamentos del LCAAPS.
Los UCAVs del LCAAPS en el video del AFRL también se muestran conectados en una red, permitiendo un vuelo en formación coordinada e intercambiando datos de sensores entre las plataformas, similar a como han mostrado otras compañías de defensa en sus conceptos futuros.
El UCAV principal, Especie 1, tiene como misión principal el combate aire-aire, es un diseño bimotor, con tomas de aire ventrales y un solo empenaje vertical. Los drones colaborativos o Especie 2 son monomotores, con la toma en la parte superior del fuselaje, y con una cola en V . Claro, que tan solo se trata de una visión «artística» del concepto, un estudio de diseño, y podría no tener nada que ver con la configuración de las aeronaves finales.
Curiosamente, mientras que la USAF y el programa NGAD utilizan el acrónimo CCA (Collaborative Combat Aircraft), el AFRL parece preferir el acrónimo ACP (autonomous collaborative platform) que es favorecido por el Reino Unido.
El Gambit de General Atomics Aeronautical Systems Inc. (GA-ASI) fue desarrollado, en parte, para validar el concepto de ‘género/especie’ desarrollado por el AFRL como parte del programa LCAAPS. Tanto Gambit como LCAAPS se centraron en construir varias variantes de aeronaves a partir de un chasis central común.
El XQ-67 OBSS (Off-Board Sensing Station) de la General Atomic es en muchos sentidos análogo a la plataforma ISR de larga duración Gambit 1, y el contendiente CCA deGA parece estar muy basado en el mismo núcleo común, y es ampliamente equivalente al avión de combate aire-aire Gambit 2.
Actualmente, la USAF (y en general cualquier fuerza aérea moderna) depende de un número relativamente pequeño de plataformas de muy alto coste, y muy altas capacidades para operar en entornos altamente amenazados, pero este enfoque tiene sus limitaciones, y se tiende a cambiar a favor de un mayor número de vehículos, aunque más especializados, baratos y a ser posible fungibles, para lograr una masa crítica que permita ganar el control de la situación por saturación.
El programa LCAAPS del AFRL marca una transformación fundamental en la forma en que se desarrollan nuevas plataformas, proporcionando a las fuerzas estadounidenses capacidades rápidas, receptivas y de bajo costo para superar a sus adversarios.
El B-21 reemplazará gradualmente a los bombarderos B-1 Lancer y B-2 Spirit para convertirse en la columna vertebral de la capacidad de ataque global flexible de la USAF, con permiso de los B-52 y sus renovadas capacidades con sus nuevos motores.
La USAF y el Departamento de Defensa han ido librando fotos con cuentagotas, que hemos ido recogiendo en el blog, y ahora —por fin— han publica el primer vídeo en vuelo, el 18 de septiembre de 2024.
El Departamento de Defensa, además, ha proporcionado información adicional sobre el desarrollo del bombardero.
Los portavoces que proporcionaron actualizaciones incluyeron al GEN. Thomas Bussiere (Air Force Global Strike Command); MAJ. GEN. Jason Armagost (Eighth Air Force and Joint-Global Strike Operations Center); William Bailey (Department of the Air Force Rapid Capabilities Office) y Thomas Jones (Northrop Grumman Aeronautics Systems).
Bailey y Jones proporcionaron actualizaciones sobre cómo avanza el programa B-21. «Realmente estamos empezando a establecer un ritmo bastante bueno [y] realizando dos vuelos de prueba en una semana determinada», dijo Jones.
También detallaron que el avión había superado de forma satisfactoria el ensayo de carga estática, durante el cual prueban que el avión puede soportar las máximas cargas que se esperan que sufra en servicio. Esta prueba fue esencial para «confirmar que el diseño estructural del avión es sólido y validó la confianza en los modelos digitales», dijo Bailey. El avión ahora está pasando por una campaña de pruebas de fatiga.
Armagost discutió cómo el programa B-21 se está preparando para la entrega del avión a la Base de la Fuerza Aérea Ellsworth, Dakota del Sur, para incluir la creación de los cimientos para que los escuadrones de AFGSC estén suficientemente equipados, entrenados y certificados para la entrega de aviones, mientras que Bailey habló sobre el trabajo en equipo que ha sido esencial para el desarrollo del programa.
Bussiere abordó las amenazas estratégicas actuales que plantean los adversarios y la necesidad de la fuerza de bombarderos, y las capacidades futuras que proporcionará el B-21, para mantenerse al ritmo de esas amenazas.
«Somos la única fuerza de bombarderos del mundo libre. Probablemente no veremos una señal de demanda disminuida de nuestros comandos combatientes regionales en las fuerzas de tarea de bombarderos», agregó Bussiere. «Esa señal de demanda, en mi opinión, solo va a aumentar en los próximos años. A medida que hacemos la transición de los sistemas heredados a los nuevos, la flota B-21 proporcionará una gran comodidad a nuestros aliados y debería proporcionar una gran pausa a cualquier adversario potencial». Agregó: «Nadie en el planeta puede hacer lo que estamos haciendo ahora. Nadie en el planeta puede construir una plataforma exquisita y tecnológicamente avanzada como el B-21, y francamente, nadie en el planeta puede poner en riesgo lo que podemos poner en riesgo en el momento y lugar de nuestra elección».
Bailey se hizo eco de los comentarios de Bussiere sobre la adaptabilidad de los sistemas B-21, que fueron «diseñados con flexibilidad en mente». «Agilidad y flexibilidad, no pueden ser solo palabras de moda. Este es el tipo de cosas que necesitas poder demostrar con el tiempo. ¿Por qué? Porque va a cambiar en ti, y hemos tenido el beneficio de emplear muchas de esas estrategias en este programa», concluyó Bailey.
El programa B-21 tiene un objetivo de producción de un mínimo de 100 aviones.
Conocimos el conceto ARES (Aerial Reconfigurable Embedded System) de Piasecki allá por 2012, cuando era una especie de HUMVEE con alas en tándem y cuatro hélices entubadas, cuando DARPA tenía un proyecto llamadol Transformer TX para desarrollar un «jeep volador».
En 2014, tras la cancelación del programa, se decidió reutilizar parte del concepto como una célula no tripulada de carga, capaz de llevar todo tipo de cápsulas, desde contenedores de transporte a vehículos militares, no perdiendo del todo su función de coche volador.
El concepto es similar al que presentara en su día Airbus+Ital Design+Audi. Un módulo terrestre intercambiable, y un módulo aéreo con rotores basculantes y capacidad VTOL. El módulo terrestre bien puede ser un contenedor de carga, uno de pasaje, o un vehículo terrestre, como aún muestran algunos vídeos de Piasecki. Bien podría considerarse dentro de nuestra serie de aeronaves con cabinas desmontable.
El año pasado anunciábamos que había ganado un contrato por valor de 37 millones de dólares para continuar su desarrollo y hacerlo volar, alimentado por un sistema de células de hidrógeno que debería propulsar los desarrollos de la compañía, incluido su helicóptero PA-890, del que también hablamos en este blog.
Y por fin, 14 años después de la concepción del proyecto, el ARES ha volado, porfin.
El módulo de vuelo ARES-DV despegó del helipuerto oeste de Piasecki en Essington, Pensilvania, el viernes 6 de septiembre, y realizó un vuelo estacionario de aproximadamente un minuto de duración antes de descender.
Tras la toma, el equipo acopló el Módulo Móvil de Misiones Múltiples (M4) del US Army al ARES-DV y realizó con éxito un segundo vuelo estacionario de un minuto, demostrando la capacidad de su sistema de control de vuelo triplex fly-by-wire para mantener un vuelo estacionario estable en múltiples configuraciones y en un entorno terrestre dinámico.
Según la nota de prensa, ARES es un vehículo modular VTOL multimisión que puede funcionar como sistema aéreo no tripulado (UAS) o con un módulo de vuelo tripulado opcional. Los módulos transportables pueden variar desde el ya citado tripulado a módulos de carga, vehículos o módulos para proporcionar apoyo C4I, ISR, de combate y logístico multimisión integrado a fuerzas de combate pequeñas y distribuidas que operan a grandes distancias y en terrenos complejos. Los módulos de carga útil de misión rápidamente reconfigurables se apoyan en un módulo de vuelo común para ofrecer flexibilidad multimisión con una huella y un coste logísticos generales significativamente reducidos.
ARES incorpora el sistema Compact Fly-By-Wire de Honeywell Aerospace, un sistema de control de vuelo integrado que es ligero y robusto. Diseñado para caber en el espacio limitado disponible en aviones más pequeños, este sistema de última generación proporciona capacidades de control de vuelo críticas para la seguridad que normalmente se encuentran en aviones de pasajeros mucho más grandes y aviones de combate avanzados.