El avión para resucitar a una muerta (o el avión más macabro del mundo)

No solemos contar historias «de miedo» por Halloween, pero esta es tan sorprendente, tan tétrica, tan extraordinaria, tan macabra, tan cuento de terror de Halloween, que se ha hecho un hueco en el blog… Y es que este avión nació para resucitar a una mujer que había muerto de tuberculosis siete años atrás.

(a los que tienden a romantizar todo, no es una historia de amor, sino la de un obseso y posiblemente necrófilo).

El avión «Condesa Elaine/von Cosel C-3», de los años 40, nació con intención de volar hasta la estratosfera, donde su inventor esperaba que los rayos cósmicos resucitaran a su «amada», Elena Milagro de Hoyos, una mujer hispano-cubana cuyo cuerpo había sido robado de su sepultura siete años atrás por el inventor del avión.

Karl Tanzler

El inventor era Karl Tanzler, un emigrante alemán que residía en Cayo Hueso o Key West.

En 1927, Georg Karl Tanzler, de 50 años, abandonó a su esposa, Doris, y a sus dos hijas en Zephyrhills, Florida, huyendo a Cayo Hueso para «encontrar a su alma gemela». Al llegar, el inmigrante alemán afirmó tener nueve títulos universitarios y otorgándose a sí mismo un título nobiliario, reinventándose como «Conde» Carl Von Cosel.

Consiguió un trabajo como técnico de rayos X y bacteriólogo, tratando a pacientes con tuberculosis en el Hospital Marino. Era mañoso con los aparatos eléctricos, se veía a sí mismo como un mago eléctrico, científico e inventor. Von Cosel disfrutaba tocando música hasta altas horas de la noche en un órgano hecho por él mismo.

Pasaba su tiempo libre experimentando con dispositivos eléctricos, hasta que un día de abril de 1930, encontró su verdadero amor —no es amor, es obsesión—.

Elena Milagro Hoyos era una hermosa cubana española de 20 años, y Von Cosel quedó obsesionado desde el momento en que la conoció, convencido de que ella era la mujer de sus sueños durante décadas.

Elena, el día de su boda

Von Cosel contaba, y lo repetiría en sus memorias, que 30 años antes había visto una aparición de una hermosa joven de cabello oscuro. La visión le fue revelada por el «Fantasma de la Condesa Ana». La condesa (presumiblemente uno de los ancestros de Von Cosel) le retiró un velo del rostro de la joven belleza, permitiéndole ver a la mujer que profetizó que algún día sería su novia y su destino. Ahora, después de tanto tiempo, su visión del amor verdadero se había convertido en realidad.

Lamentablemente, Elena Hoyos estaba muriendo de tuberculosis, así que Von Cosel se propuso curarla. Utilizó máquinas de electrochoque, le dio tratamientos de radiación gratuitos e incluso le regaló una poción que contenía polvo de oro.

Pronto la intentó cortejar colmándola de regalos y propuestas de matrimonio, pero ella lo rechazó, siendo una devota católica cuyo esposo la había abandonado. Tristemente, en 1931, varios días antes de Halloween, la hermosa Elena falleció y fue enterrada en una tumba simple.

Von Cosel no podía soportar la idea de que se pudriera en la tierra, así que rogó a su familia que le permitieran construir un mausoleo para ella. Su cuerpo fue exhumado, colocado en un ataúd metálico y alojado en la nueva cripta, casi una pequeña vivienda completa con teléfono.

Visitaba el cadáver de Elena noche tras noche para «comunicarse» con ella por teléfono. Llegó a creer que ella suplicaba por liberarse de su «prisión» para que pudieran reunirse.

En una oscura noche de abril de 1933, incapaz de resistir los ruegos de su alma gemela, Von Cosel robó a Elena de la cripta. Se dice que la llevó a su dirigible, al que bautizó como «Condesa Elaine», creyendo que algún día volarían juntos hacia las estrellas.

Durante los siete años siguientes, Von Cosel hizo todo lo posible por mantener a su amada cerca de él; cuerpo y alma intactos. Al llegar a casa, la mayor parte de la piel de la pobre Elena se desprendió de su cuerpo cuando él la dejó caer accidentalmente. Entonces rellenó la cavidad casi vacía de su cuerpo con trapos empapados en líquido embalsamador, devolviéndola una forma más natural.

Pieza a pieza, reforzó su piel con cera y seda, tratándola con lociones, pociones y electroterapia con una bobina Tesla de un millón de voltios. Sustituyó sus ojos podridos por otros de cristal y utilizó el pelo que le caía del cuero cabelludo para tejer una peluca.

Con cuerdas de piano le unió los huesos. Después de vestirla con un traje de novia blanco, perfumó su cuerpo con aceites y le cantó melodías en su órgano casero.

Pasaron los años y Elena «dormía» a junto a Carl en su casa de Flagler Avenue, y pronto empezaron a correr rumores entre la gente de la isla de que algo raro estaba ocurriendo. Finalmente, alguien se lo contó a la hermana de Elena, Nana, que, preocupada, decidió investigar un poco. Al descubrir la momia de su hermana con un anillo de casada, denunció a Cosel a la policía, que fue detenido y encarcelado a la espera de juicio por profanación de tumbas, aunque finalmente fue puesto en libertad porque el delito había prescrito y fue encontrado ¡»sano mentalmente»!

Karl confesó a los familiares de Elena que había intentado resucitarla por numerosos métodos, y que su último intento hubiera sido el de llevarla en su avión-laboratorio hasta la estratosfera para resucitarla gracias a los rayos cósmicos.

Para asegurarse de que Elena no volviera a reunirse con Carl, sus restos fueron enterrados en un lugar secreto. Las tres únicas personas que conocían el paradero de la caja, se llevaron ese secreto a sus propias tumbas.

Carl Von Cosel regresó al centro de Florida para vivir con su hermana. Empezó a escribir sus memorias y a vender postales de su amada Elena.

La familia de Elena le había arrebatado sus restos, pero a Carl norenunciaría a su novia cadáver. Creó una réplica, un maniquí, de cera de su compañera para amarla en los años que le quedaban. Creó su rostro a partir de la máscara mortuoria de Elena. En la mente de Carl nunca se separarían.

Su cuerpo fue encontrado en julio de 1952, desplomado sobre una máscara mortuoria de Elena.

No fue hasta 1972 cuando un forense del condado de Monroe dio a conocer una información estremecedora. «En la zona vaginal —del maniquí réplica de Elena— encontré un tubo lo suficientemente ancho como para permitir el coito». Dijo el Dr. Depoo. «En el fondo del tubo había algodón, y en un examen del algodón había esperma. Entonces supe que estábamos ante un pervertido sexual».

En cuanto a sus credenciales científicas, Tanzler tenía dos patentes:

  • GB189817434A, 1898, «Aparato para producir ilusiones de linterna panorámicas».
  • US1605796A, 1926: «Máquina eléctrica».

Además de afirmar tener 9 títulos académicos, e inventarse un título de conde, afirmaba haber sido capitán de submarino en la Primera Guerra Mundial y haber escapado de un campo de prisioneros en Australia.

Podemos asumir con seguridad que sus habilidades aeroespaciales eran… limitadas, y su aeronave no avanzó más allá de lo que muestran las fotos de este texto.

La historia la hemos conocido gracias a Echoes in the Sky, y las fuentes son:

Un día como hoy en 1961 detonaba la Bomba del Zar (la madre de todas las bombas)

Hoy, en 1961, la Unión Soviética probó la bomba termonuclear más grande de la historia: una RDS-220 de 50 megatones (diseñada originalmente para un rendimiento de 100 megatones). La que más tarde sería conocida como la Bomba del Zar, fue lanzado por un bombardero Tu-95 Bear y explotó a unos 4000 metros sobre Novaya Zemlya, al norte del Círculo Ártico.

Una caricatura editorial original de Herblock (Herbert Block) en la Biblioteca del Congreso muestra una gran bomba de hidrógeno antropomorfizada, usando botas con clavos, un pequeño casco estilo centurión romano, y un brazalete con un martillo y una hoz que dice “Super Bomb Explosions.” La bomba, que tiene un aspecto algo amenazante en su “cara” masculina, está de rodillas, apoyando una de sus dos manos peludas sobre un cochecito de bebé, mientras dice: “Duerme, bebé, duerme.”

La RDS-220—diseñada y construida en solo 4 meses—tenía 8 metros de largo, 2.1 metros de diámetro, y pesaba 27000 kilogramos, incluyendo un paracaídas de 800 kilogramos para frenar la caída y dar tiempo a escapar al bombardero. Fue liberada desde más de 10000 metros y cayó durante 188 segundos, permitiendo que el Tu-95 alcanzara una distancia segura (alrededor de 48 kilómetros).

La explosión de 50 megatones fue más de 3,300 veces más poderosa que la bomba atómica de 15 kilotones que destruyó Hiroshima. Fue 10 veces más poderosa que todas las bombas convencionales —juntas— utilizadas durante la Segunda Guerra Mundial. Aunque el cielo estaba nublado sobre Novaya Zemlya, el destello fue visible a 1000 kilómetros de distancia.

Comparativa de las explosiones nucleares más potentes, incluida la de la bomba de Hiroshima, que hay que ampliar para poder ver.

La bola de fuego tenía casi 10 kilómetros de diámetro y casi tocó el suelo. La nube en forma de hongo se elevó a unos 64 kilómetros de altura—siete veces más alta que el Monte Everest y por encima de la estratosfera. Los sismógrafos registraron de 5 a 5.25 en la escala de Richter.

En Severny, a 55 kilómetros del epicentro, la explosión destruyó todas las estructuras de madera y ladrillo. Incluso a cientos de kilómetros de distancia, las casas de madera fueron demolidas mientras que las de piedra sufrieron daños. Las ventanas en edificios tan lejanos como Finlandia y Noruega estallaron por la potente onda de choque.

En 2020, la Corporación Estatal de Energía Nuclear de Rusia, Rosatom, publicó un documental desclasificado de 30 minutos sobre esta prueba de armas nucleares sin precedentes en línea. Este notable film de propaganda muestra los preparativos para la prueba (incluyendo detalles de la construcción de la bomba), la prueba en sí, y sus consecuencias.

[Podcast] Submarinos portaaviones

Posiblemente una de las armas más peculiares, que más veces se ha intentado y que más contradicciones tiene en sus especificaciones, son los submarinos portaaviones.

Los acorazados siempre fueron los reyes del mar. Los submarinos y los portaaviones llegaron para disputarles ese puesto. Y, cómo no, algunas mentes pensaron que sería interesante tener la capacidad de proyección que da el arma aérea embarcada en un medio sigiloso como los submarinos. ¡Y alguien tenía que contar esa historia! ¿Nos acompañáis a Carlos, Héctor, Esteban y a mi?

Y ya que estáis por aquí… ¡votadnos en los Premios Ivoox 2024!

Premios Ivoox 2024

El podcast se puede encontrar en Amazon MusicApple PodcastGoogle PodcastIvooxSpotify. ¡Ah! y como Google Podcast desaparece, lo podéis encontrar ya en Youtube / Youtube Music.

pd: Si la intro y la despedida os son familiares, que no os sorprenda. En un ejercicio de nostalgia podcasteril he hablado con Javier Lago para pedirle permiso y utlizar la introducción que hizo para el que, si no recuerdo mal, fue el primer podcast español sobre aviación: Remove Before Flight RBF podcast

[Podcast] Aviones espaciales

Este episodio lo hemos tenido que grabar dos veces, porque cuando propusimos hablar de aviones espaciales, cada uno pensó en algo totalmente distinto… así que hubo que replantear el enfoque de la grabación, y cada uno expuso en su tiempo lo que había considerado qué era eso de los aviones espaciales: José habló de aeronaves en atmósferas de otros planetas y lunas; Carlos y Juan hablaron de aviones orbitales y militares como el X-37; y Esteban nos habló del caso de dos paracaidistas espaciales. ¿Os quedáis con nosotros?

Y ya que estáis por aquí… ¡votadnos en los Premios Ivoox 2024!

Premios Ivoox 2024

El podcast se puede encontrar en Amazon MusicApple PodcastGoogle PodcastIvooxSpotify. ¡Ah! y como Google Podcast desaparece, lo podéis encontrar ya en Youtube / Youtube Music.

pd: Si la intro y la despedida os son familiares, que no os sorprenda. En un ejercicio de nostalgia podcasteril he hablado con Javier Lago para pedirle permiso y utlizar la introducción que hizo para el que, si no recuerdo mal, fue el primer podcast español sobre aviación: Remove Before Flight RBF podcast

Nelia y el bombardero de dulces

Nelia fue una marca de chocolate creada en Barcelona en 1923. Logró crecer e incluso competir contra las grandes chocolateras de le época, como Amatller, Juncosa, Jaime Boix, Matias López, etc. Sin embargo, el éxito duró poco. En menos de una década (1923-1931), la empresa quebró, bien por la inexperiencia de los empresarios, recien llegados al mundo del chocolate, bien por el incendio que sufrió la fábrica, bien por todo junto. Desde el punto de vista de la publicidad, fue de las primeras empresas en utilizar técnicas modernas, copiadas directamente de lo que se estaba haciendo en Estados Unidos.

Desde el punto de vista aeronáutico, que es lo que a nosotros nos interesa, fueron los primeros en hacer publicidad aérea en España.

El empresario barcelonés Rafael Massó propietario de la fábrica de chocolate, decidió adquirir un avión ligero para hacer publicidad después de sobrevolar la ciudad condal con el aviador Canudas. Por eso encargó al propio Canudas la compra de una De Havilland D.H.60 De Havilland Cirrus Moth, matriculada M-CDDA (posteriormente EC-DDA)

Conocida como Nelia, arrojaba chocolatinas con paracaídas de papel naranja sobre la barceloneta, muchos años antes de que se tiraran pelotas de Nivea.

Tras un accidente, fue reemplazada por un Avro Avian. Tras ser reparada, la De Havilland DH.60 sería transferida a Sociedad Aerotaxi SL, y posteriormente sería integrada en la Fuerza Aérea de la República.

Fuentes