Probablemente pocos lo comprendan

Muere a los 110 años el último combatiente de la Primera Guerra Mundial

Nacido en 1901, con apenas catorce años Choules se alistó en la Marina del Reino Unido poco después de que éste declarara la guerra a Alemania, y a bordo del destructor «HMS Revenge» fue testigo de la rendición de la flota teutona en 1918.

 

Estos últimos años, cada año decíamos adiós a uno.El 3 de mayo de 1915 John McCrae escribió In Flanders Fields. Poco después de este aniversario, ha caído el último. Os dejo con las palabras de Reinhart.

 

Es difícil explicar con palabras como me he sentido al leer la noticia de la muerte de este antiguo marinero. Me siento sólo, no voy a decir huérfano porque mentalmente hace años que me siento de su misma edad.

 
Hacía tiempo que no participaba en la vida del mundo dada su elevada edad pero para mí significa el fin de la esperanza. Perdonad que me ponga melodramático. La generación nacida en torno a 1900 realizaron los mayores avances tecnológicos de la historia de la humanidad, escribieron las más bellas letras y sufrieron el más cruel de los destinos.
 

Los que vieron la Primera Guerra Mundial, sin duda por la visión del infierno en estado puro, volvieron cambiados a sus casas …los que pudieron. Estos supervivientes, enfermos, traumatizados supieron describirnos lo que era el paraíso. Era exactamente lo opuesto de lo que habían vivido e intentaron que estos sueños se convirtieran en realidad.
 

Su aportación fue inmensa, inconmensurable, millones de genios científicos y artísticos anónimos que cambiaron el mundo de un modo coordinado sin tratar de estarlo nunca.
 

Por eso, cuando veo lo que es el Arte hoy, el nivel de los políticos que tenemos y cómo el progreso se ha convertido en un negocio que exprimir, lamento profundamente no haber nacido 80 años antes…Aún a riesgo de no llegar a cumplir nunca los 23 como les pasó a tantos.
 

¿Cómo me siento? Nada mejor que unas estrofas del otrora famoso poema «For the Fallen» escrito por Laurence Binyon en 1914.
 
(Ver poema completo aquí)
 

They shall grow not old, as we that are left grow old:
Age shall not weary them, nor the years contemn.
At the going down of the sun and in the morning
We will remember them.

[…]As the stars that shall be bright when we are dust,
Moving in marches upon the heavenly plain;
As the stars that are starry in the time of our darkness,
To the end, to the end, they remain.

TRADUCCIÓN:

Ellos no envejeceran, como los que quedamos:
La edad no les agotará, ni los años les condenarán.
En la puesta de Sol y en la mañana
les recordaremos.

[…]Como las estrellas que seguirán brillando cuando seamos polvo,
Marcharán en formación sobre las llanuras celestiales;
Como las estrellas que nos iluminan en nuestras horas oscuras,
Hasta el final, el mismísimo final, permanecerán.

Descansen en paz.

Por fin han vuelto todos a casa. Los que quedamos aquí ya les echamos de menos.

Deja una respuesta