Este piloto de DC-3 se conoce el avión, y el cauce del
río Caquetá, como la palma de su mano. Así que vuela por el cauce del río, siguiendo su curso, entre algunas paredes de piedra bastante impresionantes.
Por cierto, también en Araracuara hay un aeropuerto que da «respeto», solo echadle un ojo y al C-46 Comando despegando de él.